El salón de actos de la Biblioteca Can Sales de Palma se abarrotó ayer, pero no de lectores. El centro fue el escenario escogido por la consellera de Cultura, Fanny Tur, para desvelar el muy esperado documento cero del Plan de Cultura de Balears, «transversal y participativo», según remarcó la titular del área. Este primer texto está definido por un total de catorce líneas estratégicas que servirán de orientación para un equipo «amplio y abierto» que trabajará en este importante proyecto.
El Plan contempla un espacio temporal de diez años (entre 2017 y 2027) para desarrollar estas propuestas que contarán, además, con la participación del sector «y de todos los partidos políticos», subrayó Tur, quien estuvo acompañada por la coordinadora del Plan, Maria Pizà, sustituyendo a la anterior responsable, Begoña Méndez, quien dimitió de estas funciones hace apenas una semana.
Se trata de un documento cero «flexible, abierto y que se irá modificando a lo largo del camino», y que se ha sido elaborado de manera «transversal» con el resto de instituciones. En concreto, el Plan pretende ser «una herramienta que sirva para contextualizar y definir las políticas culturales, así como un acuerdo marco para el desarrollo de líneas estratégicas cuya función es coordinar y concertar las actuaciones, los recursos y las complicidades destinadas a la producción y difusión cultural». Entre sus «retos», pretende «generar espacios de diálogo y cooperación entre ciudadanos y actores culturales, intensificar los vínculos entre educación y cultura, e implicar a la juventud».
Ejes
El primer eje de este Plan es la elaboración del mapa de los equipamientos culturales de las Islas, espacios destinados «a la creación, el intercambio y la difusión de la cultura entre los ciudadanos». En este sentido, la intención es darles «visibilidad» para que «sean conocidos por los ciudadanos». En segundo lugar, se elaborará «un plan de mejora de los equipamientos públicos de titularidad estatal gestionados por la comunidad autónoma», en concreto y en el caso de Mallorca: Arxiu del Regne, Museu de Mallorca o la propia Can Sales.
El tercer apartado se refiere a la creación de nuevas infraestructuras, como el Centre Internacional de Fotografia Toni Catany, que cuenta con 4,3 millones de euros de Turespaña que expirarán a finales de 2018 sin posibilidad, en principio, de más prórrogas, o la futura sede de la Orquestra Simfònica, la Caja de Música. Después, el cuarto eje se traduce en un plan de lectura que se presentará en verano de 2018.