Los aplausos de los 70 integrantes de la Orquestra Simfònica de les Illes Balears (OSIB) recibieron el sábado por la tarde al tenor Juan Diego Flórez en la sala de ensayos del Teatro Real de Madrid. Segundos después, el director de la OSIB, Pablo Mielgo, repitió una y otra vez, en clara complicidad con el cantante peruano, Pourquoi me reveiller, la pieza del Werther de Massenet.
Esta aria forma parte del amplio repertorio que el domingo por la tarde interpretarán conjuntamente Flórez -algo resfriado, tras actuar en Praga y Munich- y la orquesta balear en un repleto Teatro Real. Las entradas se agotaron hace un mes. No había mejor debut para los músicos mallorquines que desde 2008 no tocaban fuera de la Isla.
El concierto, organizado por Juventudes Musicales de Madrid, forma parte de la gira mundial L'Amour de este tenor lírico ligero, calificado como uno de los mejores del siglo XXI por Plácido Domingo y Luciano Pavarotti.
«Este concierto es un reto. Me produce placer actuar en un lugar tan emblemático como es el Teatro Real y, además, junto a uno de los mejores tenores de este siglo», afirmó Gina Nicola, de 38 años, violín de la OSIB.
«Nada especial. Es un concierto más. Está claro que Flórez es uno de los grandes», señaló el más veterano de la formación isleña, Baltasar Clar, que en unos meses se jubila. «Nervios, ninguno, todos nosotros somos profesionales», añadía con entusiasmo. En el mismo sentido se manifestó Roberto Vinciguerra, encargado de la intendencia de la orquesta, y una pieza fundamental en el buen ambiente que este sábado se respiraba en Madrid. «Los músicos son profesionales y están tranquilos. Lo que sí hay es emoción por estar en el Teatro Real».