La reposición del montaje de la ópera Turandot en el Teatre Principal de Palma atiende a razones vinculadas con la acogida de espectadores y a cuestiones económicas. «Ha sido uno de los títulos que durante la trayectoria del teatro ha tenido más éxito, el año pasado batió récords de recaudación y de público», apostilla José María Moreno, director artístico del espacio, que justifica la programación de la obra póstuma de Giacomo Puccini, con un reparto «enteramente nacional», que clausura la XXVIII temporada de ópera y saldrá de gira en abril de 2015 por teatros de Catalunya. El elenco de este montaje en tres actos realizó ayer un ensayo general con público, antes de su estreno, mañana a las 20.30, con dos funciones más previstas, el viernes 27 y el domingo 28.
El director musical de Turandot , en esta ocasión, será Santiago Serrate, que ofrecerá una versión «muy romántica» de una de las obras corales «más difíciles que hay», en referencia al trabajo del Coro del Principal, acompañado también por la Simfònica.
Fábula
Puccini dibujó una ópera ambientada en un mundo de fábula, el que ha tratado de evocar Pablo López desde la dirección escénica. «No hay más cambios que los propios de la madurez de la obra», especifica López comparándola con el atrezzo de la representación anterior.
«Que nadie diga que en España no hay voces para este tipo de repertorio, lo que pasa es que hay que buscarlas. Sólo en este teatro se da oportunidad a alguien que no conocía nadie. Se dice con mucho orgullo pero también con tristeza», recalca Eduardo Sandoval, integrante de un reparto que completan Eugenia Bethencourt, Maia Planas, David Sánchez, Pedro Fuentes o Bartomeu Guiscafré, entre otros.