Son cuatro décadas de la trayectoria profesional de Francesc Capdevila Max (Barcelona, 1956) las que reúne la retrospectiva Oh Panòptica Ficció, que el dibujante afincado en Sineu inauguró ayer en el centro Arts Santa Mònica de Barcelona. La muestra se podrá visitar hasta el 13 de abril.
«Siempre me ha gustado cambiar, forma parte de mi carácter, por eso no he terminado nunca de recoger lo que he sembrado», asumió Max, al referirse a dos originales expuestos de su exitoso Peter Pank , dibujados en 1983 y 1984. El artista prefirió explorar otros terrenos que insistir en lo que ya funcionaba.
«A veces me muevo en el barroquismo psicodélico que lo llena todo pero también me gusta el minimalismo», comentó Max, quien nos deja ver su primera viñeta publicada, El sueño de 1973. La exposición incide en los años de la celebrada Revista Víbora , de 1979 a 1989, en las ilustraciones de numerosos carteles y portadas.
«En 1993 me autopubliqué una historieta sobre la guerra de Bosnia que repartimos en el Salón del Cómic con Pere Joan y de ahí salió la revista Nosotros somos los nuestros , y animó a mucha gente a utilizar los cómics para contar lo que vivimos en cada época», recordó Max.
La exposición incluye originales de los libros Vapor , Un paseo astral y Conversación de sombras . «He regresado a los cómics, he realizado tres libros y me he tirado a la piscina de los tebeos otra vez», argumentó el dibujante, quien aseguró que «el estilo es la manera de mirar el mundo, con los años cambias y la mirada también».
Entre los personajes representados destaca Bardín el Superrealista , que permitió a Max obtener el Premio Nacional del Cómic en el 2007. El año pasado fue el artista invitado en el estand del diario El País en la feria Arco donde presentó el mural La vida es tan misteriosa , que se incluye en la exposición de Barcelona.