En el Auditòrium pendía el cartel de no hay entradas, un logro del que pocos eventos pueden sacar pecho, pero la causa bien valía la pena. De ese modo el mallorquín de a pie contribuía significativamente contra la deforestación de la Serra de Tramuntana.
Una hora antes del inicio, en los aledaños del teatro, ya se respiraba un ambiente plenamente festivo, unos se agrupaban en las terrazas colindantes, mientras otros departían animadamente junto a la puerta de acceso al recinto. Una vez dentro, un vídeo con escenas del incendio de Andratx se encargaba de sensibilizar al público en la antesala de la gala. A continuación, Agustín El Casta , enfundado en su carismático personaje de Lorenzo Llamas, entonaba una jocosa versión del tema Delilah de Tom Jones. Mas tarde arrancaba las carcajadas del público con sus clásicas andanzas erotico-festivas.
Luego, la formación vocal Cap Pela tomo el escenario para vampirizar a pleno pulmón el himno reggae de Bob Marley, No woman no cry . Bohemian Rhapsody , de Queen, fue otra partitura que entonó el grupo. El siguiente artista en situarse frente el haz de luz fue Tomeu Penya, que obsequió a los asistentes con un par de temas de su repertorio. Las baladas de Gin Tonics y el 'cantahumor' de Riki López tomaron el relevo al de Vilafranca de Bonany. El sonido indie compareció de la mano de McRoyal; le siguió Angy, una de las artistas mas mediáticas de la velada. Antes, y de forma intercalada, se proyectaron los vídeos de apoyo grabados por Toni Nadal y Melanie Costa. Inaugurado un nuevo bloque, Lorena Ares interpretó uno de sus temas orientados a la pista de baile, al que siguió el set acústico de los veteranos Anegats y sobrepasando el ecuador de la velada, Pep Noguera, de Diabéticas Aceleradas, volvió al humor.
Hubo nuevos vídeos, de Xavi Torres y Magda Crespí, y, a continuación, Victoria Maldi subió al escenario dos temas de su debut discográfico. Madó Pereta hizo de las suyas, arrancando risas y aplausos. Tras el cómico, Jaime Anglada subió al escenario para interpretar El drac i el nostre cor , un tema compuesto unas horas antes de dar comienzo la gala. Justo antes de que el rockero tomara el escenario, se proyectó un vídeo de Rafa Nadal dando su apoyo. El pop de La Musicalité subió la temperatura, y no decayó la tensión con el siguiente invitado, Diego Martín. Entre ambos, se paso un mensaje grabado de uno de los buques insignia del Real Mallorca, Nunes, y otro de Rudy Fernández. Después, la canción de autor de Joan Bibiloni puso el acento a una velada a punto de exhalar su último aliento. El vídeo de Carles Moya y Carolina Cerezuela fue la antesala de la auténtica mascletá de la noche: la actuación de una Chenoa con numerosos fans en la grada.