La piratería le ha beneficiado. Love of Lesbian, hasta hace tres años, no tenía presencia en radios, prensa, ni televisión. Y, sin embargo, la gente acudía a sus conciertos. «Eso significaba que se estaban copiando nuestros discos», reconoce el guitarrista Julián Saldarriaga. Su tropa de seguidores proliferó con el cambio del inglés al castellano. El conjunto ha resumido las sensaciones de la gira 1999 en la dicotomía La noche eterna. Los días no vividos, un álbum que interpretará mañana, en la sala Es Gremi.
El hit Club de fans de John Boy, aquel ser «boreal, algo ambiguo y de infancia gris», agrandó aún más el «rebaño» de seguidores. El ascenso ha sido «gradual». Un «soufflé» a partir de una combinación de circunstancias como el boca a boca e Internet. «Nunca fue como una explosión en la cara», matiza Saldarriaga.
Las muestras de cariño recibidas en su anterior gira, que duró dos años, les dieron la confianza suficiente como para sacar un CD doble, de 18 canciones. La primera parte, La noche eterna, recoge las sensaciones de lo que suponía «estar lejos de casa, en una ciudad ajena, siempre de noche y viajando en carretera». En Los días no vividos, la formación inventa cómo es «todo lo que aquellas noches no te dejan vivir. No ver a tus amigos o a tu familia».
Así presenta Love of Lesbian su séptima entrega, un trabajo mitad autobiográfico y mitad ficticio. Julián Saldarriaga tiene clara la parte que prefiere: «Las noches eternas, porque los días no vividos es una melancolía. Además, las mejores historias son aquellas que has vivido. A lo mejor, con el tiempo me arrepentiré de no haber hecho otras cosas, como no haber tenido un trabajo normal o una cotización en la seguridad social».
Love of Lesbian. Mañana, a las 22.30 horas, en la sala Es Gremi. El precio de la entrada es de 25 euros.