«La buena esencia se vende en frascos pequeños». Este parece ser el lema de las galerías mallorquinas Joan Oliver 'Maneu' y Gabriel Vanrell, presentes en la VII edición de la Feria Art Madrid. Sus galeristas están satisfechos con las obras comprometidas en esta primera jornada, si bien anhelan un mayor apoyo promocional de las autoridades locales en la participación de este evento que las de Arco sí tuvieron.
Rosa Vanrell, presidenta de la Associació Independent de Galeries de Art de Balears (AIGAB), aseguró ayer que «ha venido mucha gente a solicitarnos precios y a comentarnos que el nivel de la feria está gustando mucho». Así, explica que los coleccionistas se han interesado por un grabado del recién fallecido Antoni Tapies, las esculturas y pinturas de Pedro Txillida, los acrílicos taurinos de Luca Monzani, las coloridas esculturas de Willy Ramos y las obras en óleo de los jóvenes mallorquines Tomeu Morey y Luis Dubón. Vanrell señaló que están a la espera de que el Govern les confirme la posibilidad de conceder unas ayudas en concepto de alquiler del stand. «Si se dejan de otorgar, dejará de haber representantes de Mallorca. Ya somos solo dos las que hemos podido venir porque son ferias en las que hay que estar».
Por su parte, el director de la 'Maneu', Pep Llabrés, reconoció que la calidad de las obras se ha incrementado respecto a años anteriores, aunque «falta el glamour de las subvenciones institucionales». Llabrés aseguró que ayer comprometieron cuatro obras de Miró por un valor superior a 500.000 euros. Su galería expone obra, entre otros, de Rafa Forteza, Barceló, Ñaco Fabré, Margalida Escalas o Jorge Azri. Llabrés señaló que la crisis «se nota más en el día a día de la galería, aunque no tanto en las ferias. Se sigue comprando, sobre todo obra de artistas muy consolidados y de jóvenes promesas a precios asequibles, con gran pesar para los artistas que se sitúan en el centro».