La Orquestra Simfònica de Balears revisa sus cuentas y ajusta números para poder asumir sin bajas un nuevo tijeretazo económico. El próximo año, la formación que dirige Salvador Brotons contará con un presupuesto que no alcanzará los cinco millones de euros (el Ajuntament de Palma y el Govern aportarán cada uno 1.845.080 euros y 922.000, el Consell). De momento, ya han calculado el ahorro de casi 200.000 euros «en gastos superfluos». Pero ¿será suficiente el dinero que ingresarán las instituciones en su cuenta para pagar a los músicos? Esa cifra, según fuentes consultadas, no bastaría, ya que en anteriores cursos se destinaba íntegramente a pagar las nóminas de los músicos. ¿Tendrá entonces la Simfònica que prescindir de personal o rebajar los sueldos?
El gerente, Marcelino Minaya, asegura que están trabajando en un proyecto de viabilidad para recortar otros «gastos superfluos», «no tocar el capítulo uno», el de las nóminas, y conservar a toda la plantilla. Minaya sostiene que prescindiendo de esos gastos el ahorro «es increíble».
No juzga la gestión anterior de la Simfònica, pero dice que «haciendo un uso coherente de los recursos» se puede ahorrar «unos 200.000 euros». El gerente opina que se «han externalizado [servicios] de forma indiscriminada» y cita, a modo de ejemplo, la elaboración de carteles, diseños, comentarios de programas, la página web,... De ahí se podrían ahorrar unos cuantos miles de euros, pero la hucha se llena aún más al no contratar «a azafatas y ni comprar flores para los conciertos» y, sobre todo, «con la renegociación con el Auditòrium de Palma». «Hasta ahora la orquesta ensayaba en el Auditòrium toda la semana previa al concierto. Eso tiene un coste y quizá ahora sólo tenga que alquilar el día del ensayo general y el de la actuación», apuntó Minaya.
Compromiso
La situación es compleja porque la Simfònica arrastra, además, una deuda histórica del Govern de 700.000 euros desde 2004 y que sumado a otras alcanza ya el millón de euros. Minaya sostiene que trabajan con ello, y que «nuestro compromiso es que todo lo que tenga que ver con la orquesta musicalmente se mantenga». Pero lo que se tenga que hacer, lo marcará el día a día. De momento, adelanta, también se están marcando nuevas líneas, «crear sinergias» con el mundo educativo y entre instituciones.