Calvià y música. Música y Calvià. Una estrecha relación que rompe con los clichés y estereotipos que se le presuponen a una localidad que va más allá de la cultura del sol, la playa y el dinero. Un minucioso trabajo de investigación le ha servido al guitarrista Antoni Mir y a la profesora y directora de corales Irina Capriles para descubrir y exponer las raíces de la música en la localidad.
Unas raíces que abarcan desde la historia de la iglesia y el órgano de la parroquia San Juan Bautista, pasando por las bandas municipales (la primera creada en 1928 y la última en 1984), por la creación de la Escuela Municipal de Música, el coro de Calvià hasta llegar a Radio Calvià. También hay espacio para los músicos calvianers y para los que vivieron algún tiempo en la población.
Antoni Mir e Irina Capriles iniciaron el proyecto en 2007. Ahora, después de cuatro años de intenso trabajo, están a la espera de poder publicar este proyecto. «La gran mayoría de municipios de Mallorca tienen un libro sobre los orígenes de su música. A Calvià le falta y por eso hemos decidido escribirlo», comenta Mir. Músicos como Pere Josep Canyellas, Isaac Albéniz, Norbert Schultze, Fernando Alzamora, la familia Bowden, Pere Antoni Alemany (quien fuera el primer profesor de Bartolomé Calatayud) o Jaume Moragues (el primer director de una de las primeras rondallas de mujeres) fueron músicos que eligieron Calvià como, además de residencia, lugar de inspiración y creación.
Mir, nativo de Calvià, asegura que «es importante dar a conocer a la historia musical y los artistas que han vivido en el municipio. Es otra manera de atraer a turistas». El problema aparece a la hora de publicar la obra. Necesitan apoyo para poder hacer hacer realidad un estudio «necesario». A base de entrevistas a los músicos, familiares de éstos y recopilaciones de artículos en periódicos, Mir y Capriles explican curiosidades como que Ana Torroja, de pequeña, pasó largas temporadas en la casa de Portals Nous de su abuela.