Pierre-Emanuel Leclerc, alto directivo de la Comisión Europea (CE), visitó ayer, acompañado por la consellera de Comerç i Indústria, Francesca Vives, y por el director general de Fondos Europeos, Jaume Garau, el museo modernista Can Prunera de Sóller, donde comprobaron cómo han sido invertidos los fondos que Europa destinó a la rehabilitación del casal. La visita se enmarcó en un recorrido por la Isla a los distintos proyectos cofinanciados a través del programa FEDER de fondos europeos durante el periodo 2000 a 2006, proyectos en los que está incluido el museo modernista propiedad del Ferrocarril de Sóller y de quien tiene el usufructo la Fundació Tren de l'Art.
Leclerc realizó una detallada visita por todos los espacios del Casal junto a los miembros del Consell y del consejo del Ferrocarril de Sóller, así como por el presidente de la Fundació Tren de l'Art, Pere A. Serra, y por el director del museo, Rogelio Araújo.
Leclerc se mostró «muy sorprendido por la interesante recuperación del inmueble, que además forma parte de la herencia cultural de la ciudad». Por otro lado, aseguró que el motivo de las visitas, además de conocer cómo se han utilizado los fondos europeos, es «apoyar a las autoridades baleares y colaborar al máximo para conseguir fondos de la UE apropiados para las Islas». También recordó que una de las finalidades de estos fondos es «incentivar el turismo cultural y participar en el desarrollo sostenible y la rehabilitación del entorno urbano local».
Por su parte, Francesca Vives se mostró «encantada por las inspecciones de la CE», ya que sirven para demostrar la seriedad en la realización de mejoras y rehabilitación de espacios urbanos que se han hecho estos últimos años con los fondos FEDER, entre ellos Can Prunera, con lo que hemos demostrado con orgullo que se trata de una recuperación fidedigna de una casa emblemática que, de lo contrario, se hubiese perdido totalmente».
La CE aprueba la reforma de Can Prunera hecha con sus fondos
Pierre-Emmanuel Leclerc alabó los trabajos de rehabilitación en el museo de Sóller
M. Joy |