Síguenos F Y T L I T R

La segunda 'embajada cultural' balear desembarca en el Centre Octubre de Valencia

El proyecto del Govern, desarrollado junto a Acció Cultural del País Valencià, se inauguró ayer

| Valencia |

«La historia oficial ha ocultado las relaciones intensas entre las Islas y el País Valencià. Pero, por encima de la imposición, nuestro pasado compartido nos conduce al futuro común». Así lo dijo ayer Eliseu Climent en el Centre Octubre de Valencia, sede de la asociación Acció Cultural que él preside, y que desde ahora acoge el nuevo Espai Illes Balears.

Esta segunda 'embajada cultural' del Arxipèlag, inaugurada ayer, está promovida por la Conselleria de Cultura balear y la entidad valenciana. La iniciativa sigue, con matices, la estela del Espai Mallorca de Barcelona: ser «una plataforma de promoción y difusión de nuestra cultura hacia el exterior», explicó el director general de Cultura, Pere Joan Martorell.

El Centre Octubre, antiguo almacén textil de cuatro plantas situado en pleno centro de la ciudad, alberga ya numerosas entidades. Dispone de 1.500 metros cuadrados para exposiciones temporales, conciertos o presentaciones, que convivirán con la programación propia del centro. Al contrario que en el Espai Mallorca barcelonés, en Valencia no habrá 'representación cultural permanente' en forma de tienda de productos baleares. Las acciones no sólo se desarrollarán en el Centre, sino que se aprovecharán los espacios de Acció Cultural para «hacer llegar la obra creativa de las Islas a todo el territorio».

El conseller de Cultura, Bartomeu Llinàs, destacó el Espai como un nexo de «intercambio, equilibrio y concordia para compartir palabras, raíces, tradición y arte». El Govern aporta 30.000 euros anuales al proyecto.

La inauguración reunió a unas 300 personas y contó con una actuación de la cantante Miquela Lladó. En el acto destacó la total ausencia de representantes de las instituciones valencianas. Climent fue tajante: «Es un gobierno poco proclive a las cuestiones culturales, y menos a las catalanas», dijo, mientras abogaba por una mayor colaboración que evite «ghettos autonómicos que nos conviertan en una cultura subsidiaria».

Lo más visto