Un espía británico que, después de años de intrigas y secretos de Estado, acabó viviendo en Mallorca y pintando. Ése fue Thomas Harris, miembro del servicio de inteligencia MI5, que se trasladó a vivir a la Isla en 1948, después de años al servicio de Su Majestad. Una exposición repasará su trayectoria artística en la sala de plenos del Ajuntament de Andratx.
La muestra, titulada Andratx segons Harris, será inaugurada mañana a las 20.00 horas. Al acto asistirá José Antonio Buces, sobrino de Harris. La exposición, que se podrá ver hasta el 28 de este mes, contará con 35 piezas firmadas por Harris, algunas de las cuales no se han visto nunca. Las pinturas pertenecen a su sobrino y heredero y el resto son de la familia Jaume-Enseñat, propietaria de la casa de Camp de Mar donde vivió el espía.
Andreu Jaume explica que el Harris pintor "fallecido en 1964 en un accidente de coche en Llucmajor" «dominó todas las técnicas e incluso inventó una, llamada 'transparencia', en la que combinaba rotulador y óleo sobre papel de seda para crear un efecto lumínico potente». En la muestra también se exhibirán grabados, óleos, litografías o dibujos a lápiz. Los paisajes mallorquines y los retratos "especialmente autorretratos" eran sus dos temas recurrentes.
En la inauguración, Jaume impartirá una conferencia sobre Harris, «un personaje con una biografía múltiple, con muchas vidas». Fue galerista y anticuario "dueño de la Spanish Art Gallery de Londres", coleccionista "de joyas, pinturas, sarcófagos" y estudioso de los grabados de Goya, que coleccionó. Y, por supuesto, fue pintor y espía.