ANA LARGO
Hacía más de tres años que pensaba en este espectáculo, que buscaba la fórmula y el momento de subir al escenario todo aquello que «tenía ganas de hacer». El resultado es Puro y el lugar para su estreno mundial, el Palma Arena esta noche, a partir de las 22.00 horas.
Juan Manuel Fernández Montoya se reencuentra con el público, tras más de un año alejado de los escenarios, con una apuesta por las raíces, por los orígenes; un acercamiento al flamenco más puro, porque, según explica, «es lo que me dicta el corazón». No olvida a sus referentes, muestra abiertamente la admiración por su familia, por su abuelo Farruco. Y con todo ese respeto y teniéndolo presente, asegura que intenta hacer lo que le apetece.
Sólo tiene 25 años, pero tiene claro dónde se siente más cómodo y prefiere ser fiel así mismo. Por eso huye de las modas, «son cosas que pasan», sostiene. Es por esa juventud que reconoce: «tengo mucho que aprender».
'Farruquito' presentó «ilusionado» su espectáculo ayer en Palma. «Tengo muchas ganas de entregarme al público de Mallorca, es una tierra que me gusta y siempre me han tratado con mucho cariño», confesó.
Hacía años que el artista no pasaba por la Isla, ahora llega para presentar un montaje en el que el baile cobra tanta importancia como la música o las letras. 'Farruquito' ha puesto toda la carne en el asador, todo tiene su firma. Se sentó a pensar qué quería bailar, qué deseaba contar en sus letras y, para todo ello, estará acompañado de catorce personas sobre el escenario. «Realizo un total de cinco representaciones y, en medio, la gente podrá disfrutar de un concierto de guitarra, de piano, de violín y de canto», explicó el bailaor.
Juan Manuel Fernández Montoya se sentía ayer como un niño con zapatos nuevos, emocionado por enseñarlos. No pudo evitar decir «tengo muchas ganas de bailar». Sus pies le delataban. Por eso, ha diseñado premeditadamente un espectáculo «hecho para disfrutar». El bailaor explicó que ha hecho una apuesta por un espectáculo «de muchos colores, de improvisación y musicalidad».
Su vida queda al margen, pero reconoce que «cualquier experiencia en la vida enseña, te hace ver las cosas de otra manera». Y es inevitable que eso no se note en escena.
La materia prima es la misma de siempre, pero «en este espectáculo no tengo prisa ni por hacer ni por demostrar nada». Pero más allá de lo puramente artístico, expone una dignificación de 'su arte'. «La ópera es una de las músicas con más categoría, se trata con delicadeza; la gente tiene que ir dándose cuenta de que el flamenco tiene todos los elementos necesarios para ser tratado igual, es un arte universal», explicó al referirse a las similitudes entre los dos géneros.
Puro se presenta en el Palma Arena, acompañado por tres grandes pantallas en las que, además de ver en directo lo que sucede sobre el escenario, el público podrá seguir cómo ha sido el proceso de creación. El velódromo se estrena con un montaje de estas características con aforo limitado a unos 2.000 espectadores.
El bailaor afirmó ayer que espera una buena respuesta del público. «Espero que la gente venga a vernos por miles de motivos, pero, principalmente, porque cuando uno sube al escenario, lo hace entregándose al cien por cien».
Puro Farruquito. Recinto del Palma Arena. Hoy, a las 22.00 horas. Entradas a 30 y 45 euros. VIP, 60 euros.