El artista menorquín Gerard Febrer inauguró ayer en la Capella de la Misericòrdia un muestra con telas y esculturas. El artista, que vive entre Palma y Ciutadella, explicó que su experiencia artística «se basa en la investigación y experimentación de la materia».
Una veintena de telas y 11 esculturas de marés forman el recorrido de piezas expuestas. «La pintura es muy matérica, utilizo arenilla y polvo de mármol», explicó Febrer, y añadió que a través de la figuración , «que parte de la observación de la naturaleza, y de las formas sencillas intenta transmitir un sentimiento religioso y espiritual».
Los títulos de las obras son también muy sencillos e ilustran y apoyan a la obra, como por ejemplo Ca mirant la lluna.
En cuanto a la obra escultórica, Febrer explicó que esta serie de obras pertenecen a un recorrido experimental de la veladura a la textura, del planismo al trabajo con la pasta», y dijo que observando «las texturas de la naturaleza, como por ejemplo las diferentes superficies de las piedras», se inspira. Febrer, payés de profesión, afrimó que la inspiración también surge de las Balears, «me define esta tierra».
El artista explicó que tiende a trabajar la escultura en Menorca y las obras pictóricas en Palma, «sobre todo por la facilidad de adquirir el material», aseguró.