Pese a ponerse en circulación un total de 529 copias, la nueva misión imposible de Tom Cruise acumuló en su primer fin de semana alrededor de 3 millones, cantidad bastante inferior a la que se esperaba de una película lanzada con un inusual respaldo mediático. Se confirma así el progresivo descenso de popularidad de un astro cuya carrera se está viendo afectada por sus excentricidades y presuntos montajes sentimentales.
Su causa a favor de la Iglesia de la Cienciología tampoco es vista con buenos ojos por muchos de sus antiguos incondicionales. Según se desprende de los resultados registrados por recientes estudios internacionales, «Misión imposible III» ha logrado, en su estreno estadounidense, 12 millones de dólares menos de lo previsto, algo que está preocupando a unos inversores que desembolsaron 150 millones para su producción.
También en nuestro país las taquillas han sido poco generosas con lo nuevo de Cruise. Bastante mejores son los resultados comerciales de «Bajo cero», uno de los éxitos más inesperados del momento. Historia real de amistad y supervivencia, evoca el caso de unos exploradores que, en los años 50, vivieron una tragedia provocada por las condiciones adversas del Polo Sur, siendo finalmente salvados por ocho perros de tiro. Frank Marshall, director de «Congo», firma un drama épico que, en su segunda semana, ronda los 2 millones de recaudación.