AGENCIAS-VENECIA
El Festival de Venecia premió con justicia el cine sobrio y con
incidencia social del británico Mike Leigh y del español Alejandro
Amenábar, realizadores de «Vera Drake» y «Mar adentro», grandes
triunfadoras de la sexagésimo primera edición. El jurado presidido
por el cineasta británico John Boorman concedió el León de Oro a
«Vera Drake» y el Premio Especial a «Mar adentro», mientras que los
mejores intérpretes fueron los extraordinarios Imelda Staunton y
Javier Bardem, protagonistas de ambos largometrajes.
Javier Bardem, que tras ganar en 2000 con el personaje de Reinaldo Arenas en «Antes que anochezca», repitió trofeo al mejor actor en Venecia por su interpretación conmovedora y llena de humanidad del tetrapléjico Ramón Sampedro en «Mar adentro». El realizador de este filme, Alejandro Amenábar, recogió el Premio Especial del Jurado, una especie de «segundo galardón» en importancia, por una película que recabó aplausos y buenas críticas y que ha tenido la relevancia de suscitar en España un debate social sobre la eutanasia.
Pese a esa dimensión social, Amenábar se ha centrado en los aspectos personales de los protagonistas de ese hecho, con un notable reparto y un planteamiento austero que da cabida a algunas licencias poéticas que enriquecen la obra, como las ensoñaciones de Sampedro. El jurado se movió con equilibrio y reconoció los méritos de las dos mejores películas del Festival, sin olvidar a la tercera en discordia, «Binjip», del surcoreano Kim Ki-duk, León de Plata al mejor director. Se trata de un galardón justo que subraya la valía de este joven director.