G.ALOMAR
Es Baluard recibió el pasado viernes la visita del poeta uzbeko Raim Farkhadi, especialista en pintura contemporánea, miembro de la academia de Bellas Artes de Samarkanda y autor de más de cincuenta libros. «Me ha impresionado por la armonía general entre la composición y el contenido al combinar el valor histórico del edificio con la calidad de las obras expuestas, cuyo nivel pienso que podría motivar el establecimiento de seminarios de escuelas de pintura», indicó Farkhadi.
Asimismo destacó que, en su opinión, lo principal es que «aporta un nuevo punto de vista de pintores muy conocidos que permite ampliar la idea que tenemos de ellos a través de la línea evolutiva, entre el inicio y el apogeo de su obra». Como ejemplo citó el «Paisatge de Montroig», pintado por Joan Miró en 1916. En el espacio cultural de la antigua URSS se daba una gran admiración por la pintura española, y Mallorca ha sido un paraíso creativo en este campo. Farkhadi compara Es Baluard con otros museos, como el Musee d'Orsai de París y afirma que «coleccionar obras de arte y transmitirlas es tan difícil como crearlas». Uzbekistán, según el poeta, es una síntesis de la influencia europea ejercida durante largos años por la Unión Soviética y el Islam, por lo que es en cierta forma la frontera entre Occidente y Oriente.
Desde la independencia, en su opinión, es «un país más abierto aunque con dificultades económicas». Las informaciones de índole cultural europeo, como la inauguración del Museu Es Baluard, se reciben por el canal Euronews o por Internet. «He venido cada verano durante los últimos seis años. Si te gusta un sitio siempre vuelves. En Es Baluard, un auténtico diálogo del arte, he apreciado la calidez de la recepción dispensada».