La VIII Fira AnticArt abre mañana sus puertas con una firme apuesta por la autenticidad y con la satisfacción de ser, junto a Madrid, la feria más importante de estas características. La muestra permanecerá abierta al público hasta el 24 de marzo en Fires i Congressos. Mateu Crespí, director general de Fires i Congressos, manifestó que durante estos días se espera igualar las cifras de la pasada edición, en la que se contabilizaron unas 3.300 transacciones económicas y visitaron el recinto unas 20.000 personas.
La Fira d'Antiguitats cuenta con la presencia de 79 expositores procedentes de Balears, de diversos puntos del Estado español y de Francia, que se repartirán un espacio de 2.000 metros cuadrados de exposición. Catalunya, con 26 empresas, es la comunidad con una mayor presencia en AnticArt, seguida de Balears. Anticuarios, coleccionistas, galerías de arte, restauradores y servicios son los diferentes sectores que podrán gozar los amantes de las antigüedades. Destaca la presencia de una extensa muestra de mobiliario de los siglos XVII, XVIII y XIX, además de piezas de coleccionismo en porcelana o cristal.
«En Mallorca hay un alto poder adquisitivo tanto de aquí como de fuera. Año tras año tenemos una gran afluencia de público extranjero residente, pero los que más compran son los mallorquines», comentó Crespí. El presupuesto para la feria es de 180.000 euros (unos 30 millones de pesetas).
Lo que se pretende en esta edición, aseguraron los organizadores, es aumentar el control sobre las piezas y garantizar su procedencia, así como la calidad de las mismas. Es por esto que se recomendó a los posibles compradores que pidieran un certificado de garantía. AnticArt cuenta además con un programa completo de actividades paralelas, como conferencias, que se llevarán a cabo en el mismo recinto ferial.