El actor y director de cine estadounidense Woody Allen y su esposa Soon Yi, asistieron el martes a la inauguración de la muestra «Llibres en Catalá», que se presentó en la sede del Instituto Cervantes en Nueva York. «No tenía ni idea de que existiera esta biblioteca y ya me hacen miembro de ella. Estoy encantado», declaró un sonriente Allen al recibir de manos del director del Instituto Cervantes, Antonio Garrido, el carné de usuario.
La presencia del cineasta y de su esposa hizo que la sede del Instituto fuera insuficiente para acoger al numeroso público asistente y que recibió a Allen con un gran aplauso. «Es un placer para mi estar aquí. No podía anticipar que hubiera tanto intelectuales en Nueva York», agregó Allen, entre las risas del público, sorprendido por la expectación que había despertado.
El cineasta escuchó con atención las explicaciones del conseller de cultura de la Generalitat de Cataluña, Jordi Vilajoana, y de Balears, Damià Pons, sobre la selección de cerca de 400 libros en catalán que se presentaba, y que incluía obras de la literatura estadounidense traducidas al catalán junto a las de autores que escriben en esa lengua.
También recorrió la sede del Instituto Cervantes y su director le explicó las actividades que realiza, tanto en la enseñanza del español como en la promoción de las lenguas y las culturas de España en Estados Unidos. Con suma paciencia, Allen accedió a fotografiarse con cuantos se lo pidieron o a firmar los autógrafos que le solicitaban, siempre bajo la atenta y sorprendida mirada de su esposa, que en silencio soportaba el revuelo de entusiasmo que se producía alrededor del cineasta.