Cerca de dos mil alumnos de enseñanza primaria habrán participado, entre la mañana de ayer y la de hoy, en la actividad «Audicions de l'Orquestra Simfònica de Balears», encuadrada dentro del programa «Palma, Ciutat Educativa», promovido por la regidoria d'Educació. El lugar elegido para las audiciones ha sido el Conservatori. Cada día habrá contado con dos turnos, uno a las 10.00 horas y otro a las 11.30, siendo el programa idéntico en ambos casos: fragmentos de «Carmen» de Bizet; del «Concierto para violín y orquesta número 5» de Mozart; y de «El cascanueces» y «El lago de los cisnes», de Chaikovski.
El primer turno de ayer contó con la presencia de alumnos de los colegios públicos Camilo José Cela, Gabriel Alzamora, Felip Bauçà, Establiments, y de los centros Lluís Vives y Santa Mónica. Antes del inicio de la audición, los más pequeños estaban contentos y algo revoltosos. «Creo que está muy bien ir a un concierto de música clásica. Y además es gratis», señaló Sara Sánchez, del CP Establiments. «Está muy mal. Tendríamos que ir a la playa», afirmó, ¿bromeando?, Carles García, del mismo centro.
El director de l'Orquestra Simfònica, Salvador Brotons, hizo al principio una breve salutación y también pequeñas introducciones antes del comienzo de cada fragmento elegido. Se inició el concierto con tres momentos de «Carmen». Los niños parecían pasárselo bien, guardaban un respetuoso silencio y aplaudían convencidos al final de cada pieza. El solista del primer movimiento del «Concierto para violín y orquesta número 5», Francisco García, era un 'veterano' de diez años de edad. Tras su actuación, los aplausos sonaron aún con más intensidad. Acabó el concierto con el final de «El lago de los cisnes». A continuación, los niños pudieron formular distintas preguntas tanto a Brotons como a los músicos. «¿Cuántos músicos son?», «¿A que edad empezó a practicar García?», «¿Puedo tocar en esta orquesta?».