El 'president' de la Generalitat, Carlos Mazón, reivindica la «generosidad» y la «sensibilidad humana» de los valencianos con motivo del 9 d'Octubre. «A cambio, nos devuelven menosprecio», reprocha al Gobierno, y exige que «la generosidad territorial sea bidireccional entre el Estado y la Comunitat Valenciana».
«Ni puede ni debe un español tener más privilegios que otro. Ni puedo ni debo tolerar que los valencianos no tengan las mismas oportunidades que el resto de los españoles», asevera tras reclamar «derechos para todos y respeto hacia todos porque todos somos iguales ante una Constitución que así lo reconoce por mucho que algunos quieran pervertirla».
En su artículo de opinión por el Día de la Comunitat Valenciana, Mazón defiende que «hay metas que solo alcanzaremos si trabajamos en colaboración» y señala entre ellas «la redistribución hídrica, el Corredor Mediterráneo, la financiación o la atención a la migración» como «algunos de los asuntos que requieren consenso».
El jefe del Consell argumenta que los valencianos desean trasladar al resto de españoles que quieren «avanzar juntos en un país unido» sin «diferencias en obligaciones ni derechos». «Y las únicas singularidades que admitimos son las que nos otorga nuestra cultura y nuestra lengua», subraya.
«Este es un pueblo paciente, dialogante y capaz de llegar a acuerdos siempre que se respete nuestro autogobierno, nuestro Estatut d'Autonomia y la Constitución Española, que son normas perfectamente compatibles y sincronizadas», recalca.
La generosidad, sostiene, es algo que los valencianos, han «demostrado a lo largo de la Historia». Pone como ejemplos que el primer hospital del mundo lo fundó en València el pare Jofré en el siglo XIV o que «la misión humanitaria más importante de todos los tiempos» fue la propagación de la vacuna contra la viruela a América y Asia, por parte del médico alicantino Francisco Javier de Balmis en el XIX.
Dos casos, asevera, que «demuestran el carácter altruista de esta tierra»: «Nadie puede poner en duda la sensibilidad humana de los alicantinos, castellonenses y valencianos. Ni antes ni ahora. Hemos sido, somos y seremos solidarios».
En esta línea, Mazón manifiesta que «vivir en la Comunitat Valenciana es una suerte y formar parte de España, un orgullo». «No nos gustan los límites políticos, esos que aíslan a los territorios y producen diferencias entre ciudadanos de un mismo país», añade.
Los "favoritismos" generan "discordia"
Tras insistir en que «este pueblo da cuando se le pide», argumenta que «por el mismo motivo pide cuando tiene necesidad», algo que relaciona con la falta de una financiación autonómica equitativa para sufragar los servicios públicos. Y critica que la Comunitat lleva «demasiado tiempo arrastrando la indolencia del Gobierno central, que en los últimos años encima gobierna con favoritismos incitando la discordia entre las comunidades autónomas».
«Reivindicamos con razón, con argumentos y datos --asevera--. En el último año hemos aportado trabajo y riqueza. Somos la región que ha generado más trabajo con la incorporación de 97.600 personas al mercado laboral, hemos creado 7.503 empresas y suscitamos confianza en los inversores extranjeros».
Frente a ello, el 'president' denuncia que el Gobierno devuelve «menosprecio» porque «España debe a la Comunitat Valenciana 4.500 millones en políticas sociales y los valencianos recibimos 276 euros menos por habitante que la media del resto de autonomías»: «Eso no es justo y exigimos que la generosidad territorial sea bidireccional».
Mientras tanto, asegura que el Consell saca el «máximo rendimiento» de los recursos financieros y atiende «con la máxima diligencia todas las áreas de gestión». «Hemos marcado las señales por las que han de transcurrir las políticas que mejorarán la calidad de vida de los habitantes», sostiene, y lo relaciona con las deducciones fiscales, las rebajas de impuestos para rentas bajas y medias, la reducción de las listas de espera sanitarias o que «ya existe libertad educativa».
«La sanidad y la educación es lo que más importa a este gobierno», subraya, y pone en valor la bonificación a la compra de la primera vivienda o los microcréditos para emprendedores«. Al hilo, proclama que la Comunitat es »una tierra rica en talento y llena de creatividad, con una ambición moderada que nos permite progresar en un país que nos hace más fuerte si sumamos y nos debilita si dividimos".