El Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía ha aprobado este martes la modificación de los estatutos del Consorcio Centro Federico García Lorca, tras el acuerdo de adhesión de la Fundación Federico García Lorca a dicho consorcio firmado el pasado mes de junio.
Esta nueva adhesión ha supuesto, entre otros aspectos, la modificación de los estatutos del Consorcio, que además de aprobarse por el propio organismo debe ser ratificada por cada una de las entidades consorciadas, entre ellas, la Junta de Andalucía, han detallado desde el Gobierno andaluz en una nota.
Asimismo, se han producido modificaciones en relación con su composición institucional al adherirse la Fundación que lleva el nombre del poeta granadino, lo que implica cambios en el régimen de participación que afecta al Consejo Rector, que pasa a tener dos representantes de esta entidad privada; así como a la Comisión Ejecutiva, que contará con un representante de ésta. A nivel organizativo, se crea una comisión de programación.
Por otro lado, con esta modificación se han producido cambios en el marco normativo de aplicación con incidencia directa en su régimen jurídico, como la Ley 39/2015, de 1 de octubre, del Procedimiento Administrativo Común de las Administraciones Públicas y la Ley 40/2015, de 1 de octubre, de Régimen Jurídico del Sector Público. Todo ello hace necesaria la modificación del texto vigente de los estatutos con el fin de «dotar al Consorcio y a su funcionamiento de la necesaria seguridad jurídica».
La Fundación Federico García Lorca ha entregado como aportación al Consorcio el legado del poeta de Fuente Vaqueros, tasados en un importe total de 20.943.550 euros. Comprende los originales de sus obras, dibujos, así como cartas y obras de otros artistas de su generación. Esta aportación compensa las contribuciones que la Fundación debiera realizar al presupuesto de Consorcio como integrante del mismo.
Este legado, que fue trasladado y depositado en régimen de usufructo al Centro Federico García Lorca, fue inscrito en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz, como Bien de Interés Cultural, en el año 2012, garantizando así la integridad de su conjunto y su vinculación permanente con Andalucía.