El secretario general de UGT de Catalunya, Camil Ros, ha pedido al presidente de la Generalitat, Salvador Illa, que dé continuidad en esta nueva legislatura a las políticas de izquierda del anterior Govern, que impulse nuevas medidas progresistas y que pacte «rápido» los Presupuestos.
En una entrevista de Europa Press, Ros ha celebrado que Illa se reuniera este jueves con los sindicatos: «Que las primeras entidades importantes del país con las que se reúna sean los dos sindicatos más importantes de Catalunya, esto ya para nosotros es importante, es un gesto del Govern».
«Queremos políticas, no gestos», y ha pedido a Illa que nombre al resto de cargos del Govern que faltan para empezar la legislatura de manera ágil y poder implementar políticas de izquierda.
Asimismo, ha calificado de lógica la decisión de Illa de descartar unos Presupuestos para 2024, aunque ha criticado que se ha «perdido un año» al no tener cuentas, por lo que ha pedido que las nuevas cuentas sean efectivas el 1 de enero de 2025.
Mantener el diálogo social
En este sentido, ha abogado por mantener el Consell del Diàleg Social para que los sindicatos puedan trasladar a Illa sus propuestas y puedan seguir teniendo un «papel activo en las políticas».
Ha apostado por un gran acuerdo para los servicios públicos, ya que en «la administración pública durante muchos años se ha desinvertido», y por actualizar el Pacte Nacional per a la Indústria.
También por mejorar las condiciones del trabajo del turismo para que se deje de asociar a la «temporalidad y a la precariedad laboral», así como por impulsar la Formación Profesional (FP) y mejorar las políticas activas de ocupación.
Financiación singular
En relación a la financiación singular pactada por ERC y el PSC para investir a Illa, ha convenido que es uno de los grandes retos para esta legislatura, y ha defendido que es una «herramienta» para poder hacer más políticas e invertir en infraestructuras, sanidad y educación, entre otros.
«El nuevo sistema de financiación no es un elemento para decir 'como tenemos más financiación bajaremos impuestos', como ya saldrán las patronales y alguien reclamando», ha apuntado.
Reducción de la jornada laboral
Preguntado por la posibilidad de avanzar hacia un acuerdo para la reducción de la jornada laboral hasta las 37,5 horas, ha criticado que hay «una situación de bloqueo patronal» y que el Gobierno deberá trabajar para tener una mayoría parlamentaria, donde a su juicio debería estar también Junts.
Para Ros, se trata de una política «asumible» y que cuenta con suficiente consenso social, y ha recordado que UGT y CC.OO. ya han anunciado movilizaciones para finales de setiembre para forzar a las patronales a dialogar.