El alcalde de Cádiz, Bruno García, ha dado conocimiento de la firma de un bando para evitar el aumento de viviendas con fines turísticos ilegales en la ciudad, en el que se recogen tres medidas con dicho objetivo como la suspensión de nuevas licencias en el casco antiguo, el refuerzo de la inspección y la apertura de un buzón de denuncias.
Según detalla el Ayuntamiento en un comunicado, el bando ratifica en primer lugar la coordinación con la Junta de Andalucía para la inadmisión de nuevas inscripciones de VUT en el casco histórico de la ciudad, impidiendo la presentación de la declaración responsable necesaria para habilitar el alta de nuevos pisos turísticos.
Igualmente, se establece la apertura de un buzón de denuncias al objeto de que los vecinos pongan en conocimiento de la Delegación de Urbanismo el uso o utilización de viviendas con fines turísticos con posterioridad a noviembre de 2022, fecha de entrada en vigor de la modificación del PGOU que deja fuera de ordenación estos pisos en el casco histórico y en las plantas superiores a la segunda en Extramuros.
Todo ello se complementa, según ha indicado el Ayuntamiento, con una campaña de inspección municipal que, una vez comprobado el incumplimiento de la normativa, además de poner en conocimiento de esos hechos a la Delegación correspondiente de la Junta de Andalucía, que ostenta la competencia en materia turística, se activarán los expedientes sancionadores en materia urbanística por el uso distinto al permitido, como una infracción grave, oscilando la multa entre 3.000 y 29.999 euros, tal como establece la Ley 7/2021, de 1 de diciembre, de Impulso para Sostenibilidad del Territorio de Andalucía (Lista).
La puesta en marcha de estas medidas fue avanzada por Bruno García en el Pleno sobre el estado de la ciudad celebrado el pasado 2 de julio.