La campaña de rebajas de verano de la inspección de consumo se ha cerrado con 494 visitas a establecimientos. Estos trabajos están dirigidos a controlar la información de precios en escaparates, la exhibición del doble precio en los productos rebajados y la comprobación de las condiciones de venta.
Las fechas elegidas para esta actuación se han centrado en la primera semana de julio, en base a la experiencia adquirida en años anteriores, coincidiendo con el periodo de mayor aceptación por parte de los comercios.
La presente campaña se ha focalizado en los sectores habituales: textil, calzado, complementos, hogar, muebles electrodomésticos y electrónica, ha informado el Gobierno de Aragón.
La directora general de Protección de Consumidores y Usuarios, Inma de Francisco, ha apuntado que «la programación se complementa con otras actuaciones paralelas que se derivan de las denuncias que se reciben en esta época del año».
El número de comercios que presentaban el cartel de rebajas ha ascendido a 368, que se corresponde con el 74,49 por ciento del total. La información de precios, cuestión que se ha controlado globalmente, se cumple en el 94,94 por ciento; en los que ofertan productos rebajados, se ha constatado que el 90,49 por ciento informa correctamente del doble precio. Mayoritariamente se utilizan los precios en formato de cifras, el 79,08 por ciento lo exhiben de ese modo.
Cartel informativo
Como cuestiones adicionales que han sido objeto de control, desde el Departamento de Economía han señalado que la exhibición del cartel informativo del periodo de rebajas aparece en un 63,86 por ciento y en el 94,29 por ciento se cumple con la práctica de mantener las condiciones de venta previas.
La directora general también ha señalado que «el precio que se ha de tomar como referencia inicial en cualquier modalidad de descuento o promoción, ha de ser el inferior que haya tenido el producto en los treinta días anteriores. En este apartado se está trabajando en Europa en unas aplicaciones de monitorización de precios, que también se han implantado en Aragón con el objeto de comprobar la veracidad de las ofertas».
Ante cualquier incidencia hay que reclamar ante el establecimiento o su Servicio de Atención al Cliente, que dispone de un plazo de 30 días para dar cumplida respuesta; una vez recibida la contestación o transcurrido ese periodo sin obtener una solución satisfactoria se podrá formular ante los servicios provinciales de consumo.
También cabe la posibilidad de dirigirse a la Oficina de Información al Consumidor de nuestra localidad o comarca, así como a las Asociaciones de Consumidores y Usuarios. Además, la Dirección General de Protección de Consumidores y Usuarios del Gobierno de Aragón dispone del teléfono gratuito '900 12 13 14' y la cuenta de correo 'consultaconsumo@aragon.es', para atender cualquier consulta que pueda ser planteada por los ciudadanos aragoneses.