La alcaldesa de València, María José Catalá, ha trasladado al ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, una solicitud de «entrevista personal», tras el «verdadero chasco» de la reunión del pasado 26 de junio entre la secretaria general de Transporte Terrestre del Ministerio, Marta Serrano, el concejal de Grandes Proyectos del Ayuntamiento, José Mari Olano, y el secretario autonómico de Infraestructuras y Movilidad de la Generalitat Valenciana, José Vicente Dómine, para analizar el soterramiento de las vías de Serrería.
Así lo ha anunciado Catalá este lunes, en declaraciones a los medios tras el Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV), después de que la semana pasada Serrano trasladara al consistorio y la Generalitat que la alternativa para prolongar el túnel de Serrería requerirá la financiación conjunta de las tres administraciones, al suponer una «operación urbanística», y que Olano tildara de «absolutamente decepcionante» la reunión con el Ministerio de Transportes al no haber presentado «ni plazos ni dinero».
«La reunión de la semana pasada fue un verdadero chasco para todos», ha lamentado la primera edil, que ha remarcado que las asociaciones vecinales, incluida la Federación de Asociaciones de Vecinos, «ya han manifestado que la opción 1 --de las tres alternativas de integración presentadas por el Gobierno en un estudio-- por la que opta el Ministerio es una opción que no es razonable», pues, ha criticado, «no es soterrar las vías», sino «mantener la cicatriz ferroviaria en la zona de Penya Roja, Nazaret y, sobre todo, la zona del Grao». «No es aceptable esa opción», ha insistido.
Asimismo, ha censurado que «no es aceptable» que la secretaria general de Transporte Terrestre del Ministerio --quien ha apuntado que fue la gerente de la EMT durante la legislatura anterior-- asegurara en la reunión mantenida el pasado miércoles que «no hay ninguna prisa». «Que no es ninguna prioridad para el Ministerio, para los vecinos y vecinas de Valencia sí es una prioridad», ha sostenido.
Catalá ha manifestado que «espera y confía» poder «desbloquear» en una reunión personal con el ministro «aquello que la secretaria general del Ministerio no ha sabido o no ha podido desbloquear». «Así creo que tengo que actuar», ha expuesto, y ha reprochado que lo que le trasladó Puente en marzo --«precisamente en las paellas del Puerto de este año»-- «no fue lo que pasó en la reunión de la semana pasada».
«Me aportó, desde luego, tranquilidad, me aportó disposición y, por tanto, voy a buscar a ese ministro que en marzo me dijo que esto era viable y le trasladaré que, como dice toda la ciudadanía, la primera opción no es razonable ni aceptable, puesto que mantiene una cicatriz ferroviaria en València que en el momento en el que estamos no es aceptable para la ciudad», ha concluido la alcaldesa.
"polémica ficticia"
Por su parte, preguntada por los medios por las declaraciones de la primera edil, la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé, ha hecho hincapié en la «voluntad absoluta» del Ejecutivo por «buscar la mejor de las soluciones para la ciudad» y ha aseverado «no saber exactamente qué es lo que quiere ella --Catalá-- solucionar en una reunión» y le ha acusado de impulsar una «polémica ficticia» e «inexistente» que «fue creada en un mal día para la alcaldesa y el gobierno municipal, cuando querían tapar unas declaraciones desafortunadas». «La única realidad es que el gobierno municipal fue al Ministerio a presentar un proyecto con unos túneles por donde no caben los trenes y esa es una realidad», ha aseverado.
«Oiga, mire, el Gobierno de España está dispuesto a llegar a la mejor de las soluciones y que sea la más cómoda para la ciudad de València, pero, permítame, creo que es bastante obvio entender que por lo menos puedan pasar los trenes por los túneles, por lo tanto no hay polémica alguna, hay una voluntad firme del Gobierno de España de colaborar con el Ayuntamiento de València en una intervención urbanística de la ciudad, que también hay que recordarlo», ha insistido la delegada del Gobierno.
En este sentido, ha sostenido que «lo único» que tiene que «advertir» a la primera edil es que en el proyecto presentado por el consistorio «no caben los trenes», por lo que esa propuesta «no vale». «Le damos varias opciones, es más, nos emplazamos a que ustedes solucionen también los problemas que tienen que solucionar con el colector y que busquemos la mejor solución entre los mínimos y los máximos, la que sea más conveniente», ha continuado, ha reiterado que «no hay ningún problema» y ha criticado que la valoración de OLano «buscaba a las 16.00 horas una rueda de prensa de la chistera para intentar enmascarar una situación muy incómoda para la alcaldesa».«Pero no hay nada más», ha apuntado.
Ante las críticas de Catalá a la opción 1 presentada por el Ministerio, Bernabé ha asegurado que «nadie ha dicho que la opción 1 sea la opción única y válida». «Lo que ha dicho el Gobierno de España es que está dispuesto a hablar con el Ayuntamiento a nivel técnico». «Que, por cierto, el Ayuntamiento tiene que solucionar también algunos problemas con el colector y, en esa misma reunión, se trató incluso con el director general de Infraestructuras de la Generalitat, que también le pidió al Ayuntamiento de València que se pusieran las pilas para poder solucionar este problema», ha argumentado.
«Aun así, el Gobierno de España está más que dispuesto» a reunirse con Catalá, ha afirmado la delegada, y ha bromeado que «si quiere ir al despacho del ministro a verse con él, pues estupendo, maravilloso, seguramente le irá muy bien el paseo, pero desde luego polémica no hay ninguna».
"¿observadores de la onu para una obra?"
Por otra parte, sobre la petición de José Mari Olano de que unos técnicos independientes del Ministerio corroboraran la «inviabilidad» de la propuesta 3 como requisito por parte del consistorio de aceptar la opción 2, Bernabé ha afeado que quiera que «vengan técnicos externos para validar esa afirmación de que no caben los trenes». «¿Qué traemos? ¿Observadores de la ONU para una obra?», ha ironizado, a la vez que ha lamentado que, «al final, todo raya el ridículo».
La delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana ha defendido que los técnicos del Ministerio de Transportes de España son «técnicos que han estado con todos los gobiernos de la historia reciente, con gobiernos de un color y de otro», y ha reivindicado que los ingenieros técnicos del Ministerio son «dignísimos funcionarios, expertos funcionarios, que hacen su labor de control y supervisión de los proyectos». «Ese proyecto que ha presentado no es válido y el Gobierno de España está encantado de buscar la mejor solución», ha zanjado.