La oposición en el Ayuntamiento de València (Compromís y PSPV) ha urgido a la alcaldesa, Mª José Catalá (PP), a «pedir perdón» tras sus declaraciones en las que explicó que no se colocan banderas en el balcón consistorial ni por el Orgullo ni por los días internacionales de la ELA, el Alzhéimer o el cáncer. Por su parte, el grupo 'popular' ha criticado la «utilización torticera» de estas palabras y ha trasladado su «respeto» hacia el colectivo LGTBI por «el hecho de amar, sentir y respetar con independencia de la orientación de cada uno».
Antes del pleno municipal de este viernes, día del Orgullo, los grupos de la oposición han comparecido acompañados por entidades LGTBI en la plaza del Ayuntamiento para lamentar las declaraciones de Catalá y anunciar la presentación de una moción conjunta para instarle a desdecirse de sus palabras. Posteriormente, ya dentro del hemiciclo y al inicio de la sesión plenaria, Compromís y PSPV han instalado delante de sus bancadas banderas arcoíris para visibilizar este día internacional y trasladar su apoyo al colectivo.
Tras ello, el segundo teniente de alcalde y portavoz de Vox, Juanma Badenas, ha pedido la retirada de estas enseñas del hemiciclo. La alcaldesa ha consultado esta petición con el secretario municipal y ha explicado después que la exhibición de estos símbolos no contraviene ninguna normativa si están instaladas delante de las bancadas de los grupos, por lo que ha señalado que «no habrá ninguna necesidad» de quitarlas.
En declaraciones a los medios, antes del pleno, el portavoz del equipo de gobierno y del PP, Juan Carlos Caballero, ha defendido que no hay «mayor visibilidad» que proyectar durante toda la semana, como se ha hecho, los colores de la bandera LGTBI en la fachada del Ayuntamiento, mientras ha criticado la «utilización torticera» de las palabras de Catalá por parte de la oposición «en un tema en el que deberíamos contar con el mayor consenso posible».
Además, ha destacado que el consistorio se ha adherido a una declaración institucional de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) por el Orgullo, al tiempo que ha remarcado que el PP no pedirá, como Vox, que la oposición quite la bandera LGTBI de los balcones de sus grupos municipales. Ha aludido de este modo a los estandartes instalados por Compromís y PSPV esta semana en el exterior de sus dependencias.
También en declaraciones previas a la sesión plenaria, el portavoz de Vox ha reiterado el rechazo de su partido a la «ideología LGTBI» y a los «grupos artificiales creados por la corrección política». «No vamos a consentir que esas banderas cuelguen de nuestros edificios municipales», ha dicho, ya que, según él, contraviene la ley.
Desde la oposición, la portavoz de Compromís, Papi Robles, ha denunciado que «el PP ha pasado de intentar invisibilizar la lucha por los derechos LGTBI a directamente atacarla e insultarla al verbalizar abiertamente que son equiparables a personas con enfermedades». Además, ha recordado que a partir de 2015, cuando se produjo el cambio de gobierno a un ejecutivo progresista, se instaló la bandera arcoíris en el balcón junto a las entidades del colectivo, mientras ha lamentado que hoy València es una ciudad «más gris» con PP y Vox en el Ayuntamiento.
Borja Sanjuán (PSPV) ha advertido que «cada vez que hay una alcaldesa que lanza palabras homófobas está invirtiendo en violencia». «Pedimos perdón como institución a todas las personas que se han visto atacadas y ofendidas y que van a sufrir las consecuencias de esas palabras», ha manifestado, y en cualquier caso ha augurado que esta «anomalía» solo durará «tres años más» hasta las elecciones de 2027.
"salir del siglo xix"
Por parte de las entidades, el coordinador de Lambda, Fran Fernández, ha achacado las declaraciones de Catalá a su «mochila de homofobia», que a su juicio es algo que «se cura con educación, reconociendo tu falta de formación y pidiendo disculpas».
Si la alcaldesa hubiera hecho esto, ha afirmado que «no habríamos sufrido el escarnio nacional de que se vincule València, como pasó el año pasado en Náquera, con el odio y con la discriminación de sus administraciones». «València es mucho más que eso y la alcaldesa, que para mí no es el PP, es mi alcaldesa», ha aseverado, y le ha instado a recapacitar, «salir del siglo XIX» y no «manipular» los derechos del colectivo.
Desde Crisalis, asociación de familias de infancia y juventud trans, su portavoz, Raquel, ha denunciado «la discriminación e invisibilización que están sufriendo nuestras infancias y adolescencias con acciones que está realizando el gobierno como retirar libros sobre diversidad de las bibliotecas, las guías específicas en la web de la Conselleria y muchísimas más cosas»
Como secretario de la fundación Valencia Diversitat, Jorge García ha criticado que Catalá «utiliza la mayoría que le da Vox al PP» para «usurpar los puestos que corresponden a las entidades. »Está mintiendo a la ciudadanía y a la prensa. Hoy es el día en el que le quitaremos la careta a Catalá", ha aseverado.