El Consorcio de Bomberos de Valencia ha celebrado una jornada sobre la campaña forestal 2024 para dar a conocer a sus responsables operativos de la dirección de incendios forestales las novedades sobre los recursos disponibles para la presente campaña, así como el balance de la anterior, donde se ha analizado el incendio de noviembre en Montitxelvo. «Nos encontramos ante una situación muy complicada por la falta de precipitaciones y una situación de extrema sequía», ha advertido.
Asimismo, se han abordado las previsiones meteorológicas para este verano y su repercusión en el comportamiento de los incendios forestales. La jornada ha tenido lugar junto al parque de bomberos de Paterna, en las instalaciones de Asivalco, según ha informado el propio Consorcio en un comunicado.
Ante la llegada de los meses «más complicados desde el punto de vista forestal por el riesgo de incendios», el inspector jefe del Consorcio, José Miguel Basset, tres técnicos forestales y un técnico coordinador de brigadas forestales han hecho repaso a los aspectos más destacados en torno a las «lecciones aprendidas» de los incendios de 2023, la situación actual, el papel de las brigadas forestales ya integradas en el Consorcio y las «previsiones de futuro».
En este sentido, pese a las recientes lluvias, el escenario para este verano es «muy complicado», ha advertido Basset: «Nos encontramos ante una situación muy complicada por la falta de precipitaciones durante el periodo de invierno y en la propia primavera que junto con una situación de extrema sequía deriva en un elevado estrés hídrico en la vegetación, una gran acumulación de vegetación en nuestros montes que hace que el combustible presente una alta disposición para arder en el caso en que se declare un incendio forestal».
Además, ha incidido en que «el alcance que provoca esta situación va aún más allá», puesto que la «situación de falta de agua provoca en la masa forestal su debilitación», lo que «favorece que se vea afectada por enfermedades y una indefensión frente al avance de plagas como los insectos barrenadores que acaban matando los árboles afectados incrementando, aún más si cabe, la cantidad de vegetación muerta y, por tanto, la carga de combustible acumulada».
Otro aspecto importante que se ha destacado es el estudio que los técnicos han realizado sobre las zonas especialmente afectadas por esta situación en la provincia de Valencia y donde se identifican aquellas en las que la estrategia a seguir «deberá fundamentarse en »efectuar un ataque muy contundente desde el principio".
Durante la jornada también se ha puesto de manifiesto que, pese a que la época estival ha sido «tradicionalmente la que implicaba más riesgo» de incendios forestales, en las últimas campañas se ha apreciado ya «un cambio de tendencia» y una «desestacionalización» de los grandes incendios forestales, como el caso del incendio de Villanueva de Viver (Castellón) de marzo de 2023 o el de Montitxelvo (Valencia) en noviembre.
Por ello, el Consorcio actúa «de manera contundente» contra los incendios forestales durante todo el año, mediante la disposición de refuerzos en situaciones de alerta 3 y la disposición de sus brigadas forestales en modo vigilancia preventiva en estas situaciones. En este sentido, también solicita a la ciudadanía la «máxima colaboración» en la adopción de «todas las medidas preventivas necesarias» para evitar incendios.