Un grupo de personas, que se encontraban atascadas por el embotellamiento habitual de las horas vespertinas en la Vía de Cintura de Palma, ha podido presenciar una agresión a través de las ventanillas de un vehículo; por lo que han tratado de interceder y han llamado inmediatamente a las fuerzas de seguridad.
El impactante suceso ha tenido lugar sobre las 17:20 de la tarde de este lunes en la vía mencionada, a la altura del cementerio y poco antes de llegar a la altura del centro comercial Ocimax. Uno de los testigos ha explicado a Ultima Hora que «he visto un coche que se encontraba en el carril izquierdo y del cual han empezado a salir mechones de pelo por la ventanilla, poco después he podido ver a la víctima y estaba ensangrentada, ha sido el instante en el que me he dado cuenta de que estaba presenciando una agresión».
Este conductor, que se encontraba muy cerca del coche donde se producía el maltrato, ha salido del vehículo para tratar de ayudar a la mujer golpeada y ha intentado sacarla del coche; aunque el agresor ha podido zafarse y continuar la marcha. El testigo ha tratado de seguirle y ha visto como continuaba por la Carretera de Valldemossa.
Detrás del vehículo en el que sucedía la agresión, conducía una pareja de ciudadanos alemanes, la mujer ha contactado con el 091 y ha ofrecido datos descriptivos a los agentes. De hecho, en la sala de Policía Nacional, se encontraba una agente con conocimientos de alemán que ha podido recoger la declaración de la testigo y, gracias a ello, ha dado aviso inmediato a sus compañeros. Esta rápida actuación ha permitido a Policía Nacional localizar al individuo y proceder a su detención.
El coche fue alcanzado a la altura del término municipal de Bunyola donde, finalmente, se acabó deteniendo a las dos personas; ya que, además de las heridas que presentaba la mujer, el hombre mostraba también signos de mordiscos. Ambos fueron detenidos; ella por un delito de violencia doméstica y él, detenido por violencia de género.
Ambos fueron trasladados a un centro hospitalario donde se procedió a valorar sus heridas. Los testigos se mostraban aún nerviosos e intranquilos tras el impacto sufrido por el suceso, ya que la situación dejó una intensa angustia y tensión a todos los presentes. Afortunadamente, la colaboración ciudadana ha sido clave en este caso y pudo detenerse un mal mayor.