Una operación conjunta de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria, Guardia Civil y Policía Nacional ha permitido desarticular una organización criminal con más de 3.000 kilos de tabaco de contrabando y más de 9.000 kilos de material precursor de fabricación ilícita de labores de tabaco que contaba con cinco fábricas de picadura y dos almacenes de hoja de tabaco en las provincias de Málaga y Sevilla y que está acusada de defraudar dos millones de euros.
Según informan en un comunicado conjunto, la investigación se inició a finales del año 2023 tras detectar una nave industrial en la localidad malagueña de Mollina que estaba siendo utilizada como lugar de ocultación, almacenaje, preparación y fabricación de tabaco de contrabando que posteriormente era distribuido por toda España.
Los agentes lograron identificar a parte de los integrantes de la organización e iniciaron un operativo en distintos puntos de Andalucía que permitió detectar numerosas ubicaciones, naves y domicilios de interés que albergaban cada una de las fases de la producción ilícita de cigarrillos de tabaco ilegal.
Cadena de montaje desde picado de hoja hasta envasado
Una vez establecida la rutina diaria de trabajo llevada a cabo por los miembros de la red, a principios del pasado mes de abril tuvo lugar la primera fase de explotación de la investigación con el arresto de once personas presuntamente involucradas en los hechos y el desmantelamiento de una fábrica ilegal de picadura de tabaco en Mollina.
En esta nave se encontraba establecida una cadena de montaje compuesta por diversas máquinas empleadas en el procesamiento y picado de la hoja de tabaco, envasadoras y otros materiales. Tanto en su interior como en un vehículo que se encontraba en las inmediaciones fueron intervenidos 1.209 kilos de picadura de tabaco y 2.880 kilos de strip, hoja de tabaco troceada, tres máquinas picadoras y diversos materiales precursores necesarios para desarrollar la fase inicial de picado de tabaco.
Continuando las investigaciones, a finales de abril se desarrolló una segunda fase de la operación que finalizó con otras 13 detenciones y cinco entradas y registros, tres en la provincia de Sevilla y dos en la de Málaga. Además, se llevaron a cabo tres inspecciones en naves industriales de Sevilla --dos-- y Málaga --una--, que permitieron desmantelare cuatro fábricas de picadura y dos almacenes de hoja de tabaco troceada e intervenir más de 6.490 kilos de hoja de tabaco tipo strip y 2.500 kilos de picadura.
Armas con silenciador y mira telescópica
Durante el operativo se han intervenido además cinco armas de fuego --un subfusil, un rifle con mira telescópica, una pistola con silenciador, una escopeta que figuraba como sustraída y una pistola de fogueo--, tres armas de aire comprimido --dos revólveres y una carabina--, cinco armas blancas --cuatro machetes y una catana--, 75.175 euros en efectivo, doce vehículos --entre ellos varios de alta gama y dos camiones-- y maquinaria para el procesado del tabaco.
Las indagaciones de los agentes permitieron averiguar que la comercialización se materializaba a través de canales ilícitos de distribución y, según los investigadores, se estima una cuantía defraudada superior a los dos millones de euros.