El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha asegurado este martes que, tras las últimas lluvias que dejó la borrasca Nelson a su paso por Andalucía durante la Semana Santa, «ahora cabría la posibilidad de llenar las piscinas privadas» después de las restricciones que impuso en marzo el Gobierno andaluz en las Demarcaciones Hidrográficas de su competencia, aunque ha advertido de que se trata de un ámbito donde son los ayuntamientos los responsables de la decisión.
En una atención a los medios de comunicación antes de iniciar su visita a la Feria de Sevilla, preguntado por la posibilidad del llenado de las piscinas privadas en la Andalucía oriental, Moreno ha explicado que «les trasladamos las advertencias» a los corporaciones locales sobre los límites de consumo de agua con la premisa de que «tienen un papel de máxima responsabilidad», al tiempo que ha recordado el cambio de escenario por cuanto «hace tan solo un mes ni siquiera las piscinas de las urbanizaciones iban a poder abrir».
El presidente andaluz ha aludido a la desigual situación sobre reservas de agua que tiene la Comunidad, de manera que en la parte occidental de la región «están un poco más sobrados de agua de boca», hecho que constrata con que «Málaga y Almería están más justitas».
«Los ayuntamientos tomarán esa decisión», ha insistido el presidente de la Junta, quien ha asegurado que «nos vendría muy bien» tener lluvias en abril o en el mes de mayo.
La Junta de Andalucía anunció el 14 de marzo, a través del secretario general de Agua de la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Ramiro Angulo, el acuerdo por unanimidad para permitir el llenado de piscinas públicas municipales, clubes deportivos o sociales, aquellas que se destinan a fines terapéuticos en centros sanitarios y las de alojamientos turísticos que figuren en el registro oficial de la Junta de Andalucía.
Lo hizo tras presidir las reuniones telemáticas de la Comisión para la Gestión de la Sequía de la demarcación hidrográfica de las Cuencas Mediterráneas Andaluzas y del Guadalete-Barbate.
La pasada semana las Comisiones de Seguimiento de la Sequía de las Cuencas Hidrográficas Mediterráneas, de Guadalete-Barbate y Tinto-Odiel-Piedras acordaron ampliar los límites que se establecieron en febrero para el consumo urbano, agrícola e industrial.
Así, en la demarcación hidrográfica del Tinto-Odiel-Piedras-Chanza (Huelva) se acordó el descenso del recorte a las dotaciones de riego del 50% al 25 %, que se ha aprobó por unanimidad.