El director general de Salud Mental del Gobierno de Aragón, Manuel Corbera, y la directora del Centro de Rehabilitación Psicosocial (CRP) Nuestra Señora del Pilar de Zaragoza, Cristina Laguna, han participado este viernes en la puesta en marcha de la nueva zona deportiva de este centro dedicado a la salud mental.
Se trata de una pista polideportiva --para fútbol sala, baloncesto y tenis--, pista de petanca y una zona de nueve elementos de gimnasio al aire libre, ubicados estos últimos en la zona de Psicogeriatría, que constituyen un parque biosaludable.
Todas estas nuevas instalaciones están abiertas a los usuarios de los dispositivos de salud mental del Sector Sanitario Zaragoza III. El objetivo es dotar a las unidades de hospitalización de salud mental de media y larga estancia de materiales y equipamientos para la recuperación de los usuarios en las áreas de terapia ocupacional y ejercicio y actividad física.
El director general de Salud Mental, Manuel Corbera, ha manifestado que supone «dar un paso más hacia el bienestar de nuestros pacientes». Según ha contado, el ejercicio y la actividad física «son un aspecto clave en el desarrollo integral de las personas ya que permiten reducir o prevenir el riesgo de enfermedades cardiovasculares y de otra índole, mejorar el estado de ánimo, aumentar la autoestima y proporcionar bienestar psicológico».
Desde el punto de vista social, el deporte, especialmente si se practica en equipo, aumentan la autonomía y la integración social, «imprescindible en los casos de personas con diversidad funcional física, sensorial o psíquica». El director general ha añadido que para quienes sufren trastornos mentales graves la actividad física regular ayuda a evitar un estilo de vida sedentario, «reduce el estrés y la ansiedad, promueve la relajación y el autocontrol, es un buen tratamiento antidepresivo, favorece la expresión emocional, aumenta la confianza y contribuye a su rehabilitación psicosocial».
Abordaje integral de la enfermedad mental
Este proyecto se desarrolla en un proceso de mejora de la asistencia en todas las etapas del proceso clínico del paciente psiquiátrico.
En concreto, contempla la dotación de equipamiento con materiales para la actividad física, psicomotricidad y otras actividades terapéuticas, destinados a estas unidades de carácter hospitalario, donde los programas para la recuperación en los usuarios en estas áreas son claves para un abordaje integral de la enfermedad mental. Se trata de elementos facilitadores de las dinámicas internas del centro, contribuyendo a la convivencia y la participación activa de los pacientes.
Además, posibilita la integración y la mejora clínica en los programas de rehabilitación hospitalaria de media y larga estancia y está abierto al resto de dispositivos del centro.
La directora del Centro de Rehabilitación Psicosocial Nuestra Señora del Pilar de Zaragoza, Cristina Laguna, ha comentado que estas nuevas instalaciones y la adquisición de nuevos materiales sirven para completar «unas necesidades básicas para nuestros pacientes» tanto en lo que se refiere a actividades deportivas, como musicales, que permiten desarrollar «la necesidad de expresión corporal y musical» de los usuarios.
El coste de esta actuación ha sido de unos 50.000 euros, financiados con fondos del Gobierno central para la Estrategia de Salud Mental. Incluye, además de las obras, la adquisición de elementos como una mesa de ping-pong, un futbolín exterior y un karaoke. Tras el acto de inauguración, usuarios y profesionales del centro han jugado un partido de fútbol.
Centro nuestra señora del pilar
El Centro de Rehabilitación Psicosocial Nuestra Señora del Pilar de Zaragoza es un hospital psiquiátrico abierto, dedicado a la atención especializada de salud mental en sus distintos ámbitos para personas mayores de 18 años.
Cuenta con un equipo de 250 profesionales multidisciplinares y está formado por un conjunto de recursos que abarcan diferentes aspectos del tratamiento especializado en salud mental, desde la atención general ambulatoria en el Centro de Salud Mental Delicias; el tratamiento rehabilitador en el ámbito comunitario en el Centro de Día Romareda; y, en régimen de hospitalización, en las Unidades de Media y Larga Estancia y Psicogeriatría, así como una unidad de Hospitalización Intensiva para pacientes subagudos.