La consellera de Justicia, Derechos y Memoria, Gemma Ubasart, ha afirmado que su cargo está a disposición del presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, desde que fue nombrada.
Lo ha dicho en una entrevista este miércoles en TV3 recogida por Europa Press al preguntársele si ha puesto su cargo a disposición de Aragonès ante las peticiones de dimisión de los sindicatos de prisiones: «Desde el momento que me nombró, mi cargo está a su disposición».
«El presidente sabe que él me da la confianza y en cualquier momento mi persona no tiene que entorpecer en lo que sea mejor para el Govern. El presidente sabe que mi función la puedo hacer yo o quien él crea conveniente», ha añadido.
Al repreguntarle si lo ha comentado con Aragonès después del asesinato de una cocinera de la cárcel de Mas d'Enric (Tarragona) el 13 de marzo, ha replicado: «Tenemos el diálogo y la confianza para que esto pueda pasar, pero las conversaciones que yo tengo con el presidente son conversaciones que tengo con el presidente».
Sobre si volvería a ser consellera, ha contestado: «Mi lealtad se debe al presidente, que me hace un encargo, y a este encargo es al que me debo»; y respecto a si le han ofrecido estar en la lista electoral de ERC ha recordado que ella llegó al Govern como independiente.
«No entraba en mis cálculos ir en ninguna lista electoral. Desde el principio creo que mi perfil ha sido muy institucional e independiente», ha añadido respecto a si ERC le ha propuesto concurrir con la formación a la selecciones del 12M.
El bloqueo "no puede volver a pasar"
Sobre el asesinato de la cocinera de Mas d'Enric, ha insistido en que el riesgo 0 no existe, pero trabajan en mejorar la seguridad, y cree que la dimisión del director de la prisión, Paco Romero, «ni mucho menos se tiene que ver como un cabeza de turco», ha aplaudido su profesionalidad y ha reiterado que mantendrá funciones directivas en otro puesto.
También ha comentado que el martes se retomaron las negociaciones con los sindicatos, ha señalado que los bloqueos en las prisiones supusieron vulnerar derechos fundamentales de presos y poner en riesgo la seguridad de los trabajadores, lo que «no puede volver a pasar».
Preguntada por si habrá sanciones por las protestas que no estaban amparadas por una convocatoria de huelga, ha contestado: «Veremos cuáles son los escenarios sobre la mesa, pero esto no puede volver a pasar».