Cerca de un centenar de zaragozanos ha rendido homenajea a las dos víctimas mortales y los 40 heridos del atentado terrorista junto a la Iglesia de San Juan de los Panetes de Zaragoza, donde se ha reprochado «las concesiones a los herederos de ETA» --referido a EH Bildu-- por parte del Gobierno de España.
Así lo han explicado la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, la presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) en Aragón, Lucía Ruiz, y el sargento del Ejército de Tierra, José Marco; acompañados de autoridades militares y civiles en el acto de homenaje que se ha realizado este martes, 30 de enero, para conmemorar el 37 aniversario del atentado, junto a la placa colocada en el muro colindante con la iglesia San Juan de los Panetes.
Chueca ha indicado que este acto se ha celebrado en memoria de las víctimas en uno de los atentados «más sangrientos y brutales» que se han cometido en la ciudad.
«En un día como hoy, en 1987, con un frío similar al que sentimos en estos momentos, sufrió Zaragoza un brutal atentado ejecutado por la banda terrorista ETA, que hizo saltar por los aires un autobús en el que viajaban alumnos, profesores y personal de la Academia General Militar», ha lamentado.
En este sentido, ha señalado que «perdieron la vida» el comandante e ingeniero del Ejército de Tierra, Manuel Rivera Sánchez, y el conductor del autobús, Ángel Ramos Saavedra.
«Los zaragozanos volvimos a sentir ese nudo con esa sensación de dolor, de rabia y de impotencia ante los brutales asesinatos de la banda terrorista ETA», ha expresado.
Ha comentado que el coche bomba se llevó la vida de personas inocentes matando a sangre fría con el único motivo de formar parte del Ejército de España.
«A las víctimas se las recuerda y se les reclama en su nombre memoria, dignidad y justicia porque por mucho que algunos intenten que olvidemos lo sucedido, aquí y en otros puntos de Zaragoza de España, los asesinos y los que hoy son sus herederos --refiriéndose a EH Bildu-- seguirán siendo siempre eso, asesinos», ha asegurado.
"herederos de eta" en el congreso de los diputados
De esta manera, ha apuntado que las víctimas del terrorismo siguen sintiendo el dolor «cada vez que ven a los herederos de ETA» sentados en el Congreso de los Diputados y «consiguen una nueva concesión o que continúan sin condenar los asesinatos» que cometieron los terroristas.
Por ello, ha precisado que sigue «habiendo demasiados» crímenes terroristas sin resolver en España y que existen «demasiados etarras» que no han pagado por sus actos terroristas.
«Desde sus sillones, los herederos de ETA dan por hecho que como ya no matan, como ya no hay atentados, les tenemos que estar agradecidos. Se olvidan de que si Bildu está en las instituciones es única y exclusivamente gracias a la generosidad de un sistema constitucional y democrático en el que ellos no creen y que han intentado siempre destruir», ha manifestado.
La alcaldesa ha apostillado que no hay que olvidar de dónde viene Bildu y qué hizo ETA, aunque se les «haya regalado» la entrada a las instituciones públicas en España.
«Los demócratas no se nos olvida que son asesinos. Por eso estamos aquí, porque los herederos del terrorismo no nos engañan con el uso de un lenguaje ni con su falsa apariencia de demócratas. Los asesinos serán siempre asesinos», ha aseverado.
Asociación de víctimas del terrorismo
Por su parte, la presidenta AVT en Aragón, Lucía Ruiz, ha vuelto a condenar el atentado terrorista que ocurrió hace 37 años cuando un coche bomba colocado por ETA, junto a la iglesia de San Juan de Panetes, alcanzó a un autobús de la Academia General Militar.
«Hace 37 años lo que no nos podíamos ni imaginar es en lo que se ha convertido este país después de tanto sufrimiento. Las víctimas tenemos, a día de hoy, una sensación de indefensión y de derrota total al ver que Bildu sigue siendo clave en la gobernabilidad de este país», ha lamentado.
Ruiz ha subrayado que Bildu es un partido que sigue «sin condenar el terrorismo» y que en las últimas elecciones municipales celebradas en España contaba con «más de 40 terroristas» en sus listas y «varios de ellos» con delitos de sangre.
«Hay algo preocupante que desgraciadamente está todavía pasando más desapercibido y es que los terroristas y sus herederos nos están ganando la batalla», ha agregado.
No obstante, ha puntualizado que «la verdad» de las víctimas del terrorismo «es la verdad, por más piedras y por más obstáculos que nos pongan en el camino».
Sobre el acto, ha concretado que la intención es repetir cada año el homenaje para conseguir que las víctimas sigan vivas en la memoria de toda la sociedad. «Las víctimas del terrorismo no solo somos números en estadísticas desgarradoras», ha añadido.
Asimismo, ha precisado que este lunes han recordado a las víctimas y a los heridos «de este acto tan cobarde» que tuvo lugar en Zaragoza, «y lo hacemos con amor, resiliencia, con luz y con esperanza, y con la promesa de que jamás les vamos a fallar».
Experiencia personal en el atentado
Por su parte, el sargento del Ejército de Tierra, José Marco, ha hecho declaraciones antes de comenzar el acto de conmemoración para contar cómo vivió el atentado terrorista en primera persona debido a que viajaba en el autobús militar.
«Era sargento cuando ocurrió el atentado de aquí hace 37 años. Iba dentro del autobús y fue un día aciago y terrible», ha recordado indicando que estaba «medio dormido» cuando se produjo la explosión.
La experiencia personal, según ha detallado Marco, fue notar la explosión, una gran presión, mucho calor y un silencio absoluto hasta que se da cuenta que habían desaparecido todos los cristales del autobús y cerca había restos de un coche ardiendo.
«La verdad es que es una sensación muy extraña y es una mochila que he llevado cargada desde ese día. Me cambió la vida a mí, a toda mi familia y a muchos compañeros que iban en el autobús», ha concluido.