La reserva de agua embalsada en la Cuenca del Ebro es de 4.889 hectómetros cúbicos, el 63 por ciento de su capacidad total, a fecha 26 de diciembre, según los datos facilitados por la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) este lunes.
En estas fechas, la reserva de 2022 se elevó a 3.416 hectómetros cúbicos, el 44 por ciento de la capacidad. El promedio de los últimos cinco años, de 2018 a 2022, ha sido de 5.042 hectómetros cúbicos, el 65 por ciento de la capacidad total, y el mínimo de los últimos cinco años se produjo en 2022, con 3.416 hectómetros cúbicos, el 44 por ciento de la capacidad total.
En la actualidad, no se supera la reserva promedio de los últimos cinco años, aunque se está por encima de la cifra de 2022 y del mínimo, que se produjo en el mismo año.
La reserva actual de los embalses de la margen derecha es de 290 hectómetros cúbicos, el 43 por ciento de su capacidad. La reserva en esta fecha en 2022 era de 406 hectómetros cúbicos, lo que representa el 60 por ciento.
El promedio de los últimos cinco años ha sido de 383 hectómetros cúbicos, el 56 por ciento, y el mínimo de los últimos cinco años ha sido en 2018, con 358 hectómetros cúbicos, el 53 por ciento.
La energía hidroeléctrica potencial en esta fecha es de 2.425 gigavatios hora (GWh), lo que representa el 53 por ciento de la capacidad máxima de la cuenca del Ebro.