El Gobierno de Aragón aumentará el control sobre las empresas que reincidan en las infracciones de transporte. Las más frecuentes son incumplir el máximo de horas de conducción diarias, no respetar los tiempos de descanso de los conductores o cargar más peso del permitido.
A falta del cierre del ejercicio 2023, entre el 1 de enero y el 10 de noviembre, el servicio de inspección ha propuesto 396 sanciones relativas a los tiempos de conducción y descanso, 289 de ellas leves, 63 graves y 44 muy graves, cuya cuantía asciende casi a 140.000 euros.
Estas son algunas de las cifras más relevantes recabadas por el Servicio de Gestión e Inspección de Transporte, que realiza campañas periódicas en coordinación con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para tratar de garantizar el cumplimiento de la normativa en materia de transporte, velar por un mercado libre en condiciones de igualdad entre las empresas del sector y mejorar la seguridad de todos los usuarios de las carreteras.
Plan de inspección 2024
Con estos datos sobre la mesa, hoy se ha aprobado el nuevo Plan de Inspección de Transporte por Carretera de Aragón para el año 2024, el documento que determina las líneas de actuación y las campañas específicas en función de los nuevos escenarios de fraude detectados en el territorio de la Comunidad Autónoma de Aragón y en base a las reformas legislativas que se hayan producido.
Uno de los principales criterios recogidos por el plan de 2024 será el aumento de los controles en aquellas empresas que sean habituales y reincidentes en la comisión de infracciones, manteniendo una coordinación y colaboración activa con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
El Plan de Inspección de Transporte por Carretera de Aragón establece una serie de indicadores que permiten analizar, una vez finalizada su vigencia, aquellos aspectos en los que es necesario aumentar los controles, aquellos en los que se ha conseguido un mejor cumplimiento de la normativa en materia de transportes y aquellas medidas que es necesario implementar con carácter novedoso al detectar nuevas infracciones.
En este sentido, el plan de 2023 ha permitido concluir que algunas de las medidas implementadas en el pasado ejercicio han surtido efecto, como la relativa al control biométrico mediante huella o pupila para chequear la asistencia de los alumnos de los centros de formación de conductores profesionales, un sistema que ha permitido reducir las infracciones cometidas en este ámbito.
Control de furgonetas
Además, se ha detectado la necesidad de seguir incidiendo en las campañas de control del peso de carga, especialmente en furgonetas, del control de la documentación de transporte, y de seguir desarrollando las líneas de actuación habituales para evitar la competencia desleal y garantizar las condiciones laborales del personal implicado en el transporte.
Se contempla asimismo en el plan la realización de jornadas formativas que contribuyan a una mayor concienciación en el cumplimiento de la normativa en materia de transporte por carretera, dada la incidencia en la seguridad vial, en el mantenimiento de las infraestructuras y, en definitiva, poner el foco de atención en una movilidad segura.