El acuartelamiento Primo de Rivera de Alcalá de Henares recibirá a los migrantes trasladados desde Canarias en tres fases que arrancarán a partir del 20 de noviembre con la llegada de 250 personas y culminarán en la segunda quincena de diciembre para completar el máximo de 1.134.
Así lo ha trasladado la alcaldesa de Alcalá de Henares, Judith Piquet (PP), tras mantener una reunión con la directora general de gestión del sistema de acogida de Protección Internacional y Temporal, Amapola Blasco, para explicar la llegada de migrantes a estas instalaciones militares, donde recalarán bajo la atención de Accem.
El Ministerio de Migraciones ha explicado que el traslado se realizará en tres fases, con 378 migrantes cada una de ellas, hasta completar la capacidad máxima de 1.334 en este centro en la segunda quincena de diciembre.
Dentro de esta primera fase, 250 personas llegarán entre el 20 de noviembre y hasta final de mes; otras 378 recalarán durante la primera quincena de diciembre; y en la segunda quincena del último mes del año se completará con el recibimiento a los 378 finales.
El horario para pernoctar en el centro será de 10 a 22 horas, momento a partir del cual se impedirá el acceso. El lugar donde se les ubicará estará totalmente separado de la parte de la base que utiliza el Ejército de Tierra y, además, contará con servicio médico y de Enfermería, así como zonas de esparcimiento.
Personal del Ministerio hará de enlace con el campamento y los servicios públicos del Ayuntamiento para cualquier cosa que se pudiera necesitar.
En declaraciones a los medios tras el encuentro, la alcaldesa ha explicado «pese a todas estas informaciones técnicas, sigue habiendo grandes lagunas en la gestión política de la crisis migratoria por parte del gobierno de Sánchez».
«Por un lado, no saben decirnos cuánto tiempo van a permanecer estos inmigrantes en Alcalá, no saben decirnos cuánto tiempo permanecerán, cuándo se irán y hasta cuándo va a estar en este campamento en el acuartelamiento Primo de Rivera», ha indicado la regidora.
En este sentido, ha recalcado que por un lado les han indicado que es posible «que llegue hasta marzo», aunque tampoco les aseguran que esta fecha sea definitiva. «Por tanto, le preguntamos al señor ministro ¿puede tratarse de un CIE (Centro de Internamiento de extranjeros) encubierto en nuestra ciudad? ¿Va a haber un momento de finalización de la llegada de migrantes a nuestra ciudad?», ha subrayado.
En la misma línea, la alcaldesa ha explicado que el Ministerio también sigue sin explicar, pese a las peticiones por parte del Ayuntamiento, los criterios de reparto. «Seguimos exigiendo al ministro que nos dé el traslado de esos informes técnicos sobre los que supuestamente está basado el criterio de reparto y por qué más de 1.000 personas llegan a nuestra ciudad».
Al hilo, ha subrayado que en este encuentro se ha reconocido por parte del Ministerio la necesidad de un Plan de Seguridad y, de hecho, se ha subrayado que contará con seguridad privada y «con videovigilancia», y ha explicado que se ha pedido la coordinación del Ayuntamiento con la Policía Nacional y la Policía Local.
«Algo que nosotros exigimos en la Junta Local de Seguridad que convocamos, y que en ese momento la subdelegada del Gobierno nos tachó de ser insolidarios y de relacionar inmigración con delincuencia. Algo que hoy ya ha quedado acreditado, porque para ellos existe un Plan de Seguridad», ha lamentado la alcaldesa, que ha exigido que se comparta ese plan.