El presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón, ha defendido este miércoles, en la sesión plenaria de las Cortes autonómicas, los nombramientos que ha realizado en el Ejecutivo que lidera, decididos con los criterios de «máxima profesionalidad y máximos méritos» para tomar «las mejores decisiones para los aragoneses».
Azcón ha comparecido, a petición del PSOE, para dialogar sobre la estructura del Gobierno. Se ha manifestado «especialmente orgulloso del trabajo de los directores generales y los consejeros» y ha recordado que el Ejecutivo PP-VOX tiene 67 direcciones generales y el cuatripartito tuvo 60, defendiendo la creación de siete más, como la de Despoblación o la de Salud Mental y la de Cuidados y Humanización, también la de Caza y Pesca.
Ha hecho notar que se ha reducido el coste de cargos eventuales, con 79, mientras que el cuatripartito empezó con 54 y terminó con 80.
Asimismo, ha aseverado que «lo mejor de un cargo público no es colocar a tu hermano en una empresa pública». Al término del debate, el diputado del PSOE, Ignacio Urquizu, ha pedido la palabra por alusiones, expresando: «El señor Azcón, mirando a mi persona, ha hecho una acusación bastante grave que tiene que aclarar, ha dicho que hay diputados autonómicos que colocan a sus hermanos en empresas públicas ¿A quién se está refiriendo, por qué está mirando a la bancada del grupo socialista?».
Azcón le ha respondido: «¿Por qué se ha dado usted por aludido, tiene algún hermano trabajando en alguna empresa pública? Si tiene algún hermano en una empresa pública entiendo que se haya dado por aludido».
En este punto, la portavoz del PSOE en las Cortes de Aragón, Mayte Pérez, ha intervenido, también por alusiones, para afirmar que «lo que es de vergüenza es que el presidente acuse sin pruebas» y la presidenta de la Cámara, Marta Fernández, ha zanjado la discusión indicando: «No hay debate» sobre esta cuestión.
Comparecencias
Por otra parte, Azcón ha apuntado que el anterior presidente aragonés, Javier Lambán (PSOE), compareció en sede parlamentaria, por primera vez, el 18 de enero de 2016, ocho meses después de su investidura, y tardó un año y medio en aceptar una petición de comparecencia del PP, mientras que él ha comparecido a propuesta del PSOE «en menos de cien días».
El jefe del Ejecutivo autonómico ha llamado la atención sobre «el nerviosismo permanente» del PSOE, que «no solo refleja la amargura de haber perdido las elecciones, sino que además demuestra que tienen pocas cosas que decir».
"prepotencia"
Mayte Pérez ha dicho que «la prepotencia mostrada por los consejeros ha supuesto un punto de inflexión», añadiendo que «la impronta que ha impuesto Azcón no tiene precedentes», criticando que «ha tardado dos meses y medio en formar gobierno y cerrar su estructura, y eso ha tenido consecuencias para los aragoneses».
«Se ha encontrado con un legado bien distinto al que nos encontramos nosotros» en 2015, ha dicho Pérez a Azcón, enfatizando que las cuentas estaban «saneadas» cuando Lambán dejó el Ejecutivo. Ha apuntado que el Gobierno de Azcón tiene 64 altos cargos frente a 56 del anterior Gobierno, un 14 por ciento más y ha preguntado «dónde está el recorte de cargos, esa coherencia de chiringuitos, que igual lo suyo es un resort».
Además, la portavoz socialista ha recalcado que «tener los mejores perfiles no es tener dos directores generales que apoyan la dictadura franquista ni elegir a una directora de Vivienda que ha estado mes y medio siendo contratada y contratista», criticando también el reciente cese del jefe de Protocolo de las Cortes, quien «ha sido fulminado por la señora Fernández con su anuencia y autorización». Al respecto, Fernández ha dicho que este es un cargo de libre designación.
Asimismo, Pérez ha considerado que el vicepresidente primero del Gobierno de Aragón y diputado de VOX, Alejandro Nolasco, está «capitidisminuido» al contar con solo una secretaria general y tres direcciones generales «vacías de contenido» por «el desequilibrio entre socios», mientras la vicepresidenta segunda, Mar Vaquero, «está omnipresente» y es «la mano que mece el Parlamento».
El portavoz del PP, Fernando Ledesma, ha afirmado que el candidato socialista a la Presidencia del Gobierno de España, Pedro Sánchez, «ya controla el PSOE Aragón porque le han puesto la alfombra roja» y ha criticado a los socialistas su decisión de «no respetar los cien días de cortesía». También ha dicho que los directores generales de Justicia y de Caza y Pesca «no han cometido ningún delito y quienes sí lo han cometido son sus socios de Bildu».
El portavoz de VOX, Santiago Morón, ha destacado que el Gobierno de Azcón ha suprimido «los chiringuitos de los comisionados, pecata minuta», manifestando su «plena confianza en este Gobierno de coalición». El diputado del PAR, Alberto Izquierdo, ha dicho que sus directores generales «van a tratar de hacer un buen trabajo y servir a los aragoneses».
El portavoz de CHA, José Luis Soro, ha afirmado que el Parlamento está sufriendo «un deterioro gravísimo» por «la injerencia en las Comisiones» o el despido del jefe de Protocolo y ha dicho a Azcón que «esto no es el Ayuntamiento de Zaragoza, aquí no vale todo, estamos representando nada menos que al pueblo aragonés y este no es su cortijo, no puede hacer lo que le dé la gana», puntualizando después que en los ayuntamientos el alcalde preside el Pleno e interviene, mientras que en el ámbito autonómico ambos cargos están separados.
Soro también le ha preguntado por qué no ha realizado una comparecencia sobre la amnistía en lugar de hacerlo en un punto del orden del día sobre otro asunto.
El portavoz de Aragón Teruel Existe, Tomás Guitarte, ha defendido «un modelo descentralizado y policéntrico» de administración autonómica y ha preguntado a Azcón «cuál es su política sobre el clima». Desde Podemos, Andoni Corrales ha opinado que «caro va a salir a los aragoneses el reparto del pastel» de la coalición PP-VOX.
En representación de IU, Álvaro Sanz, ha expresado su preocupación por «la deriva de la gestión del debate en el Parlamento» porque «no se puede hablar de lo que le dé la gana», añadiendo que «Aragón necesita respuestas concretas» en asuntos como la economía social o el territorio.