La Guardia Civil investiga a una segunda persona tras la operación desplegada este lunes y en la que ya fueron detenidas dos personas y una fue investigada supuestamente relacionadas con el robo de 56.000 kilos de aceite de oliva virgen extra en la almazara Marín Serrano El Lagar, del municipio cordobés de Carcabuey, registrado a finales del mes de agosto. En la operación se han intervenido hasta el momento unos 50.000 kilos de aceite, pendientes de analizar.
Al respecto, en la mañana del lunes los agentes de la Benemérita han activado un operativo en una almazara próxima, a unos tres kilómetros, de la localidad cordobesa de Priego de Córdoba, pero en el término de Carcabuey, para esclarecer los hechos, según han avanzado a Europa Press fuentes cercanas al caso, que mantiene abiertas las diligencias.
En concreto, el Instituto Armado abrió una investigación para esclarecer el robo que se registró en la madrugada del miércoles 30 de agosto, de manera que a primera hora de la jornada se trasladaron los agentes para comprobar los hechos e iniciar las pesquisas. Las primeras hipótesis apuntaron a que se habían utilizado camiones cisterna, dado que el aceite de oliva no estaba embotellado y envasado.
En este sentido, el gerente de la almazara Marín Serrano El Lagar, Martín Parras, ya comentó a principios de mes que el robo no era «normal», aunque remarcó que «el aceite está ahora mismo en el punto de la diana por los precios que hay, cuando lo normal es que está siempre precariamente en dos euros y no interesa venir a robarlo, y ahora los 56.000 kilos de este aceite --a 30 de agosto--, porque sigue subiendo el aceite, se podría estar hablando de 500.000 euros».
Tras precisar que «esto es algo muy preparado», y que «no lo hace cualquier persona», detalló que «cuando se hace una carga, un movimiento de aceite, hay mucha documentación detrás con el propietario, el comprador, el aceite de donde viene, la persona que va conduciendo el camión, las dos matrículas del camión y el lugar donde se va a descargar el camión».
Ante ello, hizo un llamamiento porque «el que compre sabe que ese aceite va sin documentación y está haciendo un fraude, al comprar algo ilegal», a la vez que relató que llegaron sobre las 7,00 horas del día 30 y se dieron cuenta que «los candados de la puerta principal no estaban y cuando accedimos, había cadenas también cortadas y en la última de las bodegas había como unas manchas de aceite en el suelo», de manera que «al aforar la bodega vimos que se habían llevado 56.000 kilos de aceite».
"algo muy preparado"
En su opinión, «esto es algo muy meditado y preparado», incluso dijo que creía que era «un encargo», porque «sabían lo que querían, escogieron este sitio y entraron perfectamente; sabían dónde estaban las alarmas, dónde estaba todo, los aceites, y sabían cargar las cisternas», en cuanto a la hora de colocar las mangueras. «Gente totalmente profesional», subrayó.
También se mostró «muy agradecido a la Fuerzas y Cuerpos de Seguridad porque están haciendo un trabajo encomiable, están constantemente en comunicación y no paran».
Por su parte, el alcalde, Juan Miguel Sánchez, señaló que «todo apunta a que se trata de una actuación premeditada y bien preparada, ya que han ido directos a los depósitos que tenían aceite y tenían conocimientos en procedimientos de extracción y llenado de cisternas, algo que no es tan fácil».
Además, el regidor apuntó que la falta de un documento de trazabilidad del producto, algo que según normativa se exige a la hora de comprar cualquier lote de aceite, grande o pequeño, «puede ser uno de los factores que facilite la localización de los presuntos autores del hurto».
Y el presidente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Priego de Córdoba, Rafael Muela, expresó su «preocupación» por el robo en la almazara amparada por el distintivo de calidad y mostró su apoyo a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para la resolución del caso, así como a la almazara afectada todo la colaboración del distintivo de calidad.