El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha dado plazo de diez días al Ayuntamiento de Carboneras (Almería) para que ejecute la sentencia firme que le «obliga» a revisar de oficio la licencia municipal de obras concedida en 2003 para la construcción del hotel de Azata en el paraje de El Algarrobico.
En una diligencia de ordenación de 21 de septiembre, consultada por Europa Press, la sala requiere al ayuntamiento para que le remita «certificación acreditativa» de las diligencias que ha practicado hasta el momento para dar cumplimiento al fallo de 2021 que dice que debe «tramitar el procedimiento administrativo» de revisión de oficio «por la posible existencia de nulidad de pleno derecho».
El TSJA ha adoptado esta decisión a instancias de Greenpeace, que solicitó la ejecución forzosa después de que el Tribunal Supremo (TS) declarase firme la sentencia el pasado mes de enero tras analizar los recursos en los que ninguna de las partes optó por impugnar la parte del fallo en la que el alto tribunal andaluz ordenaba la revisión de oficio de la licencia de obras.
En esa misma resolución, el Supremo dictaminó que la «complejidad» que rodea al hotel de Azata del Sol impedía ordenar su demolición por vía judicial debido a que la licencia municipal «seguía siendo plenamente legal casi 20 años después» pese a la normativa ambiental que rige en el parque natural de Cabo de Gata-Níjar y la Ley de Costas.
Señaló que el permiso otorgado por el ayuntamiento «era plenamente acorde» con el planeamiento «vigente» en el municipio en 2003 y que seguía entonces siendo «ajustado» a este «planeamiento», pese a «haber cambiado en el actual Plan General de Ordenación Urbana (PGOU)».
No obstante, el Supremo no se pronunció sobre el pronunciamiento del TSJA, que concluyó que existen «indicios suficientes» de que la licencia municipal de obras del hotel supone una «infracción grave o muy grave» a la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía (LOUA), por lo que procedía tramitar su revisión de oficio.
El requerimiento del pasado día 21 es el segundo que hace el TSJA al ayuntamiento; el primero se hizo en junio para que el ayuntamiento llevase a «puro y debido efecto» el fallo.
Supone, asimismo, la apertura de la segunda pieza de ejecución forzosa que se sigue ante este tribunal por sentencias relacionadas con el paraje, ya que se suma a la que ya se tramita por la clasificación del suelo como no urbanizable de especial protección.
El último hito en este caso se dio la semana pasada tras notificarse que la Junta de Andalucía se había personado en la ejecutoria para advertir de que el acuerdo de pleno adoptado en abril por el Ayuntamiento carbonero sería «parcialmente nulo» porque El Algarrobico es «no urbanizable desde 1994», fecha en la que se publicó la normativa ambiental del parque natural de Cabo de Gata.
La Junta ha pedido al TSJA que ordene «expresamente» al consistorio a reflejar, tanto «en sus documentos» como «en sus decisiones», que el paraje de El Algarrobico y el suelo sobre el que se levanta el hotel de Azata es «no urbanizable de especial protección desde 1994» y, por tanto, no lo es «por efectos sobrevenidos» de los tribunales.
Greenpeace ya denunció que lo aprobado por el pleno con la abstención de la oposición era «nulo de pleno derecho» por un defecto en su tramitación cometido «a sabiendas». Solicitó a la sala que multase por «una nueva maniobra dilatoria» al ahora ex alcalde José Luis Amérigo (PSOE), quien a día de hoy continúa apercibido con sanciones coercitivas de 700 euros cada 20 días.