La consejera de Educación, Ciencia y Universidades del Gobierno de Aragón, Claudia Pérez Forniés, ha comparecido en las Cortes de Aragón para explicar las líneas generales de actuación del Departamento los próximos cuatro años, en los que se desarrollará un modelo educativo basado en cuatro pilares: «libertad, calidad, equidad y excelencia».
Será, ha avanzado Claudia Pérez, una legislatura en la que «los alumnos serán el centro de todas las políticas» para garantizar su «progreso e incorporación a la sociedad como ciudadanos activos e implicados».
«Trabajaremos --ha señalado la consejera-- por »un sistema educativo que atienda a la diversidad, que sea inclusivo, transmisor de conocimientos y de valores democráticos, que eduque en la igualdad entre mujeres y hombres, que promueva el conocimiento y valoración de nuestro rico patrimonio cultural, histórico y artístico, y que permita que nuestros estudiantes construyan su proyecto personal como ciudadanos libres e iguales y que, a su vez, les inste en la construcción de una sociedad mucho más justa, más solidaria, más equitativa, y más próspera".
En cuanto al primer eje, ha defendido la libertad de las familias para elegir el centro que mejor se adapte a las necesidades de sus hijos y ha apuntado la modificación progresiva de las actuales zonas de escolarización, «tendiendo a un espacio común» y coordinando «una oferta de plazas suficiente y suficientemente dotadas».
Para asegurar la calidad, Pérez Forniés ha abogado firmemente por reforzar los recursos. En este sentido, ha comprometido «una financiación adecuada» para los centros públicos, «estudiando y evaluando las partidas para gastos de funcionamiento», y garantizando que «no quede ningún centro infradotado» como ha venido sucediendo hasta ahora.
Revisar los conciertos
En este sentido, el Gobierno autonómico impulsará, además, la revisión de los conciertos educativos para que establezcan una dotación económica suficiente para cubrir el coste real de la plaza escolar.
En cuanto al personal docente, la consejera ha afirmado que «una escuela de calidad es aquella que valora a sus profesionales adecuadamente, reconoce su trabajo y trata por todos los medios de mejorar sus condiciones laborales». «Y este va a ser nuestro objetivo a lo largo de la legislatura», ha incidido.
Asimismo, el propósito estos años será potenciar la cultura de la evaluación del sistema educativo, así como elaborar una normativa que permita flexibilizar las ratios para acomodarlas a las necesidades y posibilidades de los centros y las familias.
La calidad también se afrontará, tal y como ha desgranado en su intervención, desde las infraestructuras educativas. Para ello, se presentará un nuevo plan de infraestructuras, que «dé respuesta a las demandas de la oferta educativa y a los nuevos desarrollos urbanísticos», garantizando la digitalización responsable, así como la eficiencia energética.
Escuela rural
Sobre escuela rural, «el motor social que impulsa la vertebración y el crecimiento de los pueblos», la consejera ha reiterado el compromiso de mantener abiertos los centros que tengan escolarizados al menos a tres niños y ha asegurado que «se modernizará el equipamiento informático y la conectividad de los centros del medio rural», potenciando la colaboración con las diputaciones provinciales.
Para cumplir con el tercer eje del modelo, la equidad, y garantizar la igualdad de oportunidades, el Gobierno ampliará la política de becas, según ha afirmado la consejera; impulsará la gratuidad de la etapa de 0 a tres años, y la implantará «de forma progresiva también en los niveles postobligatorios».
Asegurar la convivencia en las aulas será --tal y como ha destacado-- «un objetivo prioritario» por lo que se pondrá el foco en la salud mental infanto-juvenil y en la prevención y erradicación del acoso escolar.
Como novedad, y en el marco de esta preocupación, ha anunciado la puesta en marcha de un programa de actuación coordinada entre los especialistas en Psicología y Terapia Ocupacional del sistema sanitario con los centros educativos. Se promoverán planes de atención temprana integral, que garanticen la escolarización temprana y el apoyo educativo a los alumnos con necesidades específicas.
Instituto de fp de excelencia tecnológica
En el campo de la excelencia, Pérez Forniés ha apostado por fomentar las vocaciones STEAM y aplicar planes lectores y de mejora en el área matemática --para revertir los resultados de los informes PISA que «aún situando a Aragón por encima de la media de España, presentan una trayectoria descendientes los diez últimos años»--, así como una estrategia de transformación digital responsable en el ámbito educativo.
Con el objetivo de adaptar la formación a las necesidades de los sectores estratégicos de la Comunidad, el Departamento reforzará el diálogo con las organizaciones empresariales y sindicales en el seno del Consejo Aragonés de la FP y pondrá todo su esfuerzo en la implementación de la ley Orgánica de nuevos desarrollos de la Formación Profesional.
Además, según ha anunciado la titular autonómica, el Ejecutivo aragonés creará el Instituto de Formación Profesional de Excelencia Tecnológica, llamado a ser el «referente en el desarrollo tecnológico que demanda el mercado de trabajo».
Universidad y ciencia
Desde el Departamento en los próximos años se potenciarán las universidades y la investigación como «motores fundamentales para el cambio, la excelencia y el crecimiento económico» en la Comunidad Autónoma.
En este ámbito, se promoverá una prueba única de acceso a la universidad, «que permita a los aragoneses competir en igualdad de condiciones», y se asumirá el acuerdo de financiación con el campus público, al tiempo que se corregirán las carencias detectadas, para la puesta en marcha de un nuevo marco a partir de 2026.
Se trabajará además para una oferta de titulaciones «atractiva, innovadora y conectada a las necesidades sociales, del mercado y del territorio», creando en Huesca un campus biosanitario, con la «implantación inmediata» del grado completo de Medicina; y comenzando a estudiar la puesta en marcha de Medicina en Teruel «como apuesta clara por la descentralización de la formación superior» y por solucionar la falta de especialistas.
En lo relativo a investigación, la consejera ha comprometido «todos los mecanismos necesarios para captar el talento en los centros de investigación aragoneses, evitando su fuga» y para «mejorar la transferencia del conocimiento científico a las empresas».
Entre varias medidas, ha citado el apoyo sostenido a las convocatorias de financiación de los grupos, garantizando un calendario que dé estabilidad a los investigadores, y la consolidación de las estructuras de investigación en Aragón, además del impulso a otras nuevas.
«Es imprescindible --ha dicho-- acercar la empresa a las universidades aragonesas para que den respuesta a las demandas de investigación y conocimiento y para que nuestros jóvenes científicos tengan oportunidades reales de desarrollo profesional y académico».