La consellera de Hacienda, Economía y Administración, Ruth Merino, se ha marcado como objetivos de legislatura impulsar más bajadas de impuestos «para todos», que ha asegurado que supondrán un aumento de ingresos a medio plazo, aprobar un presupuesto «riguroso» y sin partidas ficticias para 2024 y adoptar medidas para reducir la «desorbitada» deuda pública de la Generalitat.
Al mismo tiempo, ha garantizado que el Consell no dejará de exigir al Gobierno, «sea del color que sea» tras el proceso de investidura, la reforma del sistema de financiación autonómica, algo que hará «de forma contundente» en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), «sin cuartos oscuros y sin traiciones».
«No vamos a permitir que la financiación se convierta en una moneda de cambio para conseguir votos a cambio de privilegios para los de siempre», ha advertido en su primera comparecencia en Les Corts como consellera en alusión a las negociaciones del PSOE con partidos independentistas.
Merino, que forma parte de la cuota del PP en el nuevo Consell junto a Vox, ha prometido diálogo, no entrar en «debates gratuitos» y seguir defendiendo los «principios liberales» que ya enarboló en su etapa como síndica de Cs, así como «gobernar a largo plazo y no solo pensando en las elecciones». El objetivo prioritario, ha recalcado, es «recuperar oportunidades perdidas», atraer inversiones y estimular el desarrollo económico.
Para ello ha prometido hacer frente a la deuda pública «inasumible» de más de 55.000 millones de euros, que ha achacado a las medidas «temerarias» del anterior gobierno del Botànic. «Es una ingenuidad pensar que no tienen consecuencias: solo el coste por los intereses será de 500 millones este año», ha alertado, lo que ve como un «efecto bola de nieve» que produce una falta de confianza en los mercados. «Siempre gastaron por encima de nuestras posibilidades», ha aseverado.
En materia de impuestos, Merino ha defendido que la Comunitat deje de ser una de las autonomías «con mayor carga impositiva» para pasar a ser una de las fiscalmente más atractivas porque, ha asegurado, «la insuficiente financiación o el »derroche« no se compensan »exprimiendo al contribuyente«. Se hará mediante una rebaja fiscal »ambiciosa, responsable y pautada« para »atraer riqueza" y apoyar el emprendimiento.
Una de sus prioridades será el impulso de medidas de «alivio fiscal para todos, pero principal e inicialmente para quienes más lo necesitan», como a su juicio ya se ha demostrado con la supresión del «injusto» impuesto de sucesiones y donaciones. «Algunos han puesto el grito en el cielo por medidas que la sociedad ha elegido», ha señalado, y ha incidido en que no se trata de «bajar impuestos a los ricos» ni de beneficiar solo a las grandes fortunas.
Otro de sus objetivos es combatir el fraude fiscal y la economía sumergida «de forma firme», mediante una estrategia de la Agencia Tributaria Valenciana, así como colaborar en la recaudación de los ayuntamientos que lo necesiten.
Presupuestos: "no vamos a disparar pólvora de rey"
Respecto al presupuesto de la Generalitat para 2024 en el que ya trabaja su departamento, Merino ha garantizado que corregirá las deficiencias presupuestarias, adoptando medidas «correctivas y efectivas» desde la «responsabilidad fiscal» y garantizando la sostenibilidad de las finanzas públicas, pero «siempre con el objetivo prioritario de asegurar los derechos de los ciudadanos y garantizar unos servicios públicos de calidad».
«Serán unos presupuestos reales y no ficticios. Unos presupuestos basados en el rigor y la responsabilidad a pesar de que otros gobernantes los han utilizado para copar titulares de prensa. No vamos a disparar pólvora de rey como si los recursos fueran infinitos», ha incidido, en alusión a la «partida reivindicativa» que el anterior Consell incluía por la infrafinanciación autonómica.
La titular de Hacienda ha destacado el «desafío» que supone elaborar estas cuentas en un escenario de incertidumbres agravado por el hecho de que el Gobierno en funciones no haya proporcionado la información básica sobre la liquidación del ejercicio 2022.
Según ha argumentado, esto les «aboca» a elaborar las cuentas basándose en estimaciones de ingresos con el objetivo de presentarlas «en tiempo y forma». También ha resaltado que los primeros presupuestos elaborados con el nuevo sistema de gestión económico-financiera NEFIS para «no seguir aplazando la modernización de la administración».
"no molestar" y reordenar sector público
Tras recordar que la premisa del Consell es «no molestar» a la actividad económica, Merino ha defendido el papel que entidades como el Institut Valencià de Finances (IVF) pueden ejercer como «instrumento muy útil», sin perder de vista «la necesaria sostenibilidad financiera de las operaciones en las que intervenga», para lo que reforzará su intervención en momentos de crisis y priorizará la financiación a largo plazo de proyectos empresariales con largos periodos de recuperación, sin olvidar a las start-ups y a los proyectos sociales.
La racionalización de la inversión se concretará a través del uso «exquisito» de los recursos de todos los valencianos y de la eliminación de duplicidades y gastos «superfluos», ha garantizado. Además, el sector público instrumental será reordenado, previo análisis económico y financiero detallado de cada uno de sus entes, mediante fusiones y, en su caso, extinciones cuando sea factible que las consellerias asuman directamente sus competencias.
En cuanto a las medidas previstas en el ámbito de la Función Pública, la consellera ha detallado que se avanzará en el camino de la automatización, simplificación de procedimientos y la innovación en la manera de crear valor público y un nuevo servicio público.
«En definitiva, estabilidad, formación, modernización y diálogo permanente con las organizaciones sindicales, así como con el resto de agentes sociales, para juntos construir una administración ágil y eficiente que sea percibida como una aliada por ciudadanos, empresas y sectores productivos», ha añadido.
La oposición apunta a montoro y liz truss
Por su parte, el diputado del PSPV-PSOE José Muñoz ha calificado al Consell del «Gobierno del cambiazo» y ha asegurado que van a aplicar una «amnistía fiscal para los ricos siguiendo el mejor ejemplo de (el exministro de Hacienda) Cristóbal Montoro».
Igualmente, le ha planteado si va a presentar unos «presupuestos basados en recortes» y si les va a «bajar los impuestos a los ricos para que las clases medias tengan que vivir peor». «Están planteando la regresión», le ha espetado.
En su turno de intervención, la portavoz adjunta de Compromís Isaura Navarro ha espetado a Merino: «Usted viene aquí pensándose que a lo mejor es Robin Hood, pero se parece mucho más a Liz Truss, la primera ministra británica que duró menos que una lechuga». Además, le ha reprochado que se «le escapa el pensamiento neoliberal» y que hace «propuestas para gobernar para una absoluta minoría de la Comunitat Valenciana».
También le ha preguntado a «cuánta gente va a echar a la calle» con la reestructuración del sector público y si los Presupuestos de 2024 van a ser «regresivos». Igualmente, se ha interesado por la fiscalidad verde y los impuestos que prevé la Ley de Cambio Climático en 2025.
En su réplica, Merino ha rechazado los «parecidos razonables», sobre todo el de Robin Hood porque no va a «robar a nadie», y ha defendido su política fiscal recalcando que fue la que los ciudadanos eligieron el 28M «sin recortes en áreas fundamentales». Sobre la fiscalidad verde ha sostenido que hay «muchísimas formas» de incentivar el cuidado al medioambiente sin «imponer tasas ni impuestos».