El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número uno de Osuna (Sevilla), en funciones de guardia, tiene pendiente recibir el informe correspondiente a las autopsias de los dos cadáveres en avanzado estado de descomposición descubiertos en el interior de una vivienda de la localidad, donde han sido también halladas plantas de marihuana, así como de la plena identificación de estos cuerpos, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).
En concreto, este pasado martes, la Policía Local de Osuna acudía al domicilio de una pareja residente en el número 58 de la calle Mancilla, dado el tiempo transcurrido sin noticias acerca de estas personas.
Según la alcaldesa, Rosario Andújar, unos familiares de estas personas habrían contactado con la Policía Local de Osuna porque el matrimonio «no respondía» a las llamadas telefónicas desde varios días atrás y les «echaban de menos».
La mujer, de unos 41 o 42 años, era extranjera y se dedicaba al diseño de ropa femenina y el varón era natural de Barcelona y contaba 77 o 78 años de edad. Ambos residían en Osuna desde hace aproximadamente dos años y medios, vivían de alquiler en el número 58 de la calle Mancilla y estaban empadronados en el municipio desde hace aproximadamente un año, según la regidora ursaonense.
La localización de los cuerpos
Tras acudir la Policía Local al domicilio, los agentes solicitaron sobre las 14,15 horas la intervención de los bomberos para abrir la puerta de la vivienda y cuando los efectivos lograron al fin acceder al inmueble, encontraron los cadáveres de una mujer y un hombre en avanzado estado de descomposición, así como también plantas de marihuana.
Ante ello, fueron movilizados efectivos de la Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Sevilla para hacerse cargo de la investigación de los hechos. En torno a las 19 horas de este martes, así, la comisión judicial completaba el levantamiento de los cuerpos, que se encontraban fuertemente descompuestos.
A la espera del resultado de las pruebas de autopsia a la que han de ser sometidos los cadáveres, los mismos podrían presentar signos de violencia, toda vez que su identificación aún no estaría completada dado el intenso deterioro de los cuerpos, pero todo apuntaría a que se trataría de la pareja que habitaba la vivienda.