La Consejería de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda ha avanzado que a final del mes de agosto finalizarán las obras de refuerzo del firme en ocho kilómetros de la autovía A-92G entre Granada y Santa Fe, que cuentan con un presupuesto de más de 2,3 millones de euros con aportación de fondos europeos.
En ellas se emplean materiales asfálticos sostenibles, conocidos como Masai, que ya han sido probados con éxito en varias carreteras andaluzas para reducir las emisiones contaminantes, según ha informado la Junta en una nota de prensa este jueves.
La consejera de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda, Rocío Díaz, ha destacado la importancia de esta obra, que alcanza ya el 70 por ciento de su ejecución, «una de las muchas que se llevarán a cabo para convertir la autovía en el primer corredor verde de Andalucía».
«El Gobierno andaluz está desarrollando un ambicioso proyecto para una transformación integral de la A-92, que contará con una inversión histórica de cien millones de euros», ha recordado Díaz, quién ha subrayado asimismo que la transformación de la autovía «también incluirá actuaciones adicionales como la sustitución de luminarias de sodio por tecnología LED o la colocación de pantallas antirruidos».
La titular andaluza de Fomento ha detallado igualmente que esta importante inversión es posible «gracias a que Europa ha reconocido la apuesta por la Revolución Verde del Gobierno andaluz, con modelos sostenibles en todos los ámbitos, incluidos las carreteras».
El uso de materiales Masai ha propiciado que Andalucía sea «la única comunidad autónoma española receptora de fondos europeos para actuaciones en carreteras», de los que buena parte irán a la reparación de la autovía A-92.
La A-92G, que comunica la capital y la Vega de Granada, soporta 25.000 vehículos al día con un 16 por ciento de tráfico pesado. Su estado de conservación ha requerido de una nueva capa de rodadura en todo su trazado, salvo en el nuevo enlace con la A-44, de reciente ejecución, los ramales de acceso y salida de la autovía y las vías de servicio a su paso por Santa Fe.
Los trabajos se están realizando en horario nocturno para interferir lo menos posible en el tráfico de la zona. La Consejería de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio está impulsando el uso de estos Masai, diseñados en colaboración con la Universidad de Granada a través del Laboratorio de Ingeniería de la Construcción de la Escuela de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos.
Los Masai son mezclas bituminosas producidas a temperatura máxima de 140 grados y con características singulares, como que al menos el 20 por ciento del peso será material fresado procedente de carreteras deterioradas o el 0,5 por ciento de material reutilizado como polvo de neumáticos.
Estas mezclas ya se han probado durante el pasado mandato en pruebas piloto en carreteras de la provincia de Granada, como la A-4026, en Pinos Genil, la A-4028 en Cájar, la A-308 Iznalloz-Darro y puntos de la propia A-92 como el Puerto de la Mora o Guadix. La denominación de estas mezclas hace honor a la tribu Masai, asentada en el este de África.
Para sus miembros, la tierra y todos sus elementos son sagrados y por ello se niegan a degradarla. Su supervivencia depende de la salud y fortaleza de la naturaleza de su entorno y de «aprovechar al máximo todo lo que les proporciona, no generando ningún residuo».
Este es el espíritu principal de los nuevos materiales Masai: reutilizar, reciclar y valorizar productos ya preexistentes, incluso de la propia carretera, de forma que no se sobreexploten los recursos naturales, además de imponer nuevas técnicas de producción que permitan reducir drásticamente la temperatura de fabricación lo que conllevará menores consumos de combustibles fósiles y, por ende, una reducción notable de las emisiones durante la fabricación de las mezclas.
Además, estos materiales también permiten la inclusión de dispositivos con forma de pequeños sensores, que permitirán digitalizar la carretera, obteniendo datos en tiempo real sobre aforos, pesajes, velocidades de circulación o evolución de las propiedades mecánicas del material, entre otros aspectos.