La Comandancia de la Guardia Civil de Sevilla, a través de la Unidad Orgánica de Policía Judicial, ha llevado a cabo una operación contra el tráfico ilícito de vehículos en la provincia que ha incluido numerosos registros y hasta nueve detenciones en localidades de Dos Hermanas, Utrera, Los Palacios y Villafranca, Tomares, Camas y Alcalá de Guadaira, y con la que se dado por desarticulada una supuesta organización criminal asentada en Sevilla y dedicada al tráfico ilícito de vehículos mediante la comisión de estafas a entidades financieras y concesionarios.
La operación, denominada 'Califa', parte de una investigación iniciada a finales del año 2021, cuando los agentes tuvieron conocimiento de la adquisición fraudulenta de más de 30 vehículos en diferentes concesionarios del país mediante la aprobación de préstamos por entidades financieras, según ha informado este domingo la Guardia Civil en una nota.
En este sentido, los integrantes del presunto entramado criminal establecían comunicación con el concesionario vía telemática a través de WhatsApp, o mediante correos electrónicos creados 'ex profeso' para el intercambio de documentos precontractuales, según detallan desde el instituto armado.
La organización se componía de una red de supuestos compradores ('mulas') formada mayoritariamente por presuntos delincuentes que hacían de testaferro, los cuales hacían de personas interesadas en la compra de vehículos anunciados en portales de compraventa de internet a cambio de retribuciones económicas, según ha continuado explicando la Guardia Civil.
Desde la Benemérita han puesto de relieve que el «grado de implicación» de estas personas era tal que varias 'mulas' llegaron a recibir el pago de un billete de avión desde Sevilla hacia Lugo para recoger presencialmente un vehículo de un concesionario, que había sido adquirido «fraudulentamente mediante la contratación de un préstamo con documentación falsificada».
El 'modus operandi' consistía en la adquisición de vehículos financiados irregularmente, aportando documentación falsificada y adaptada a la identidad del testaferro, tras lo que se aprobaba la operativa de financiación por parte de la entidad financiera y se realizaba la firma del contrato, principalmente de modo telemático, aunque también en ocasiones de modo presencial, en la oficina más cercana del domicilio del supuesto cliente.
Según relata la Guardia Civil, finalizado el trámite de formalización del contrato de financiación, se concertaba la recogida del vehículo con una empresa de transporte o con el propio concesionario, concediendo supuestas autorizaciones a terceros. Llegados a este punto, el vehículo adquirido de forma fraudulenta estaría a disposición de la red criminal, estableciéndose mecanismos de venta de los mismos, logrando obtener el consiguiente beneficio económico.
Fruto de las entradas y registros realizadas en diferentes localidades de Sevilla, se ha detenido a nueve personas por supuestos delitos de estafa continuada, falsedad documental, usurpación de estado civil, pertenencia a organización criminal y blanqueo de capitales.
Prisión para el presunto líder de la trama
Entre los detenidos figura el supuesto líder de este entramado, al que se le nombra con el apodo del 'Mendocita', «conocido delincuente sevillano» y líder de una presunta organización criminal especializada en el robo de vehículos, manipulación y falsificación de vehículos, documentos, así como estafas, blanqueo de capitales y usurpación de estado civil, según ha puesto de relieve la Benemérita.
El líder detenido, sobre el que pesaban varias órdenes de búsqueda y detención, llevaba en paradero desconocido más de tres años, y estaba oculto y atrincherado en un chalet alquilado a nombre de su pareja sentimental en la localidad de Tomares (Sevilla). Según ha explicado la Guardia Civil, contaba con «grandes medidas de seguridad» en su domicilio, disponía hasta de un taller mecánico y tenía en el momento de la entrada y registros varios vehículos para darles salida tras su preparación.
Las diligencias han sido entregadas en el Juzgado de Instrucción número 3 de Utrera (Sevilla), desde donde se ha decretado el ingreso en prisión provisional para el referido principal líder del supuesto entramado criminal.
Al hilo de este caso, desde la Guardia Civil advierten de que, para los grupos delictivos organizados, «el tráfico ilícito de vehículos es una forma de obtener beneficios con pocos riesgos», y a menudo se trafica con vehículos sustraídos con el fin de financiar y llevar a cabo otras actividades delictivas.
Además, el mercado ilícito de las piezas supone una fuente de ingresos lucrativa para las organizaciones criminales, según subraya el instituto armado, desde donde recomiendan contactar con las fuerzas y cuerpos de seguridad «ante sospechas y anomalías, prestando especial atención a ganchos como precios bajos, para evitar problemas posteriores».