El candidato de Vox a la Alcaldía de Madrid, Javier Ortega Smith, ha animado a sacar este domingo en las urnas las políticas de la izquierda del Ayuntamiento de Madrid y «ser condicionantes» para evitar que los «tontos útiles» y «pafagantas» del PP sigan «gestionando y blanqueando» sus políticas".
«Lo llamaron PP porque ya estaba registrado PSOE», ha ironizado Ortega Smith en el acto de cierre de campaña de Vox celebrado este viernes, donde ha acusado a los 'populares' de «comprar» la «agenda que impone la izquierda».
En Aluche, donde Vox Madrid ha cerrado su campaña electoral para los comicios autonómicos y municipales del domingo, el candidato a la Alcaldía ha cargado también contra el alcalde y aspirante a la reelección por el PP, José Luis Martínez-Almeida, de quien ha advertido de que ofrece distintos principios en función de la ocasión «como Groucho Marx».
Entre los «cambios de opinión» del regidor, Ortega Smith ha destacado como ejemplo su decisión de rechazar inicialmente el nombramiento de Almudena Grandes como hija predilecta de Madrid para aceptarlo posteriormente «a cambio de los Presupuestos», escritora que, ha criticado el candidato, «rezumaba odio por las orejas».
Recibido al grito de «alcalde, alcalde» por el público congregado en el Centro Cultural Fernando de los Ríos, el candidato de Vox ha defendido lo «mucho» que han «aprendido» en estos cuatro años sobre las realidades de la capital, frente a un equipo de Gobierno que ha aplicado «la táctica del avestruz» con problemas como el de la inseguridad o la 'okupación'.
"síntomas peligrosos"
En este sentido, Javier Ortega Smith ha negado que su partido recurra al «alarmismo» ni al «populismo» como les reprochan otras formaciones, sino que constatan los «síntomas peligrosos» que muestra la ciudad en materia de seguridad. «No hay derecho a que haya un solo vecino de Madrid al que le hayan privado de su derecho a salir a la calle», ha subrayado.
Sin abandonar esta cuestión, el candidato ha reclamado acabar con las políticas de «fronteras abiertas» en materia de inmigración y ha lamentado que «algunos hayan comprado» esa «gran mentira» que «sólo beneficia a las mafias» y a la estrategia de «presión demográfica» que otros países ejercen contra España.
El cabeza de lista de Vox al Palacio de Cibeles ha rechazado las críticas de «matonismo» que otros políticos le han dirigido por su denuncia de la 'okupación' o la venta ambulante ilegal y se ha preguntado si «pedir ley y orden no es una obligación de los políticos». «Por decir todo esto nos han señalado», ha lamentado entre los aplausos de los asistentes.
Por último, tampoco se ha olvidado el alcaldable de sus discrepancias en materia de movilidad con Martínez-Almeida, cuyo Madrid 360, que ha vinculado al Madrid Central de Manuela Carmena --«el Madrid Central de Carmeida»--, ha calificado de «fabulosa máquina de recaudación de dinero» frente a la cual ha abogado por otra línea de actuación que permita «seguir mejorando la calidad del aire» de Madrid sin limitarse a «poner multas».