La consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales, María Victoria Broto, ha visitado las obras de la residencia de mayores que se está construyendo en el municipio zaragozano de Agón, donde ha señalado que las nuevas residencias «se levantan con la concepción de la atención centrada en la persona y con el objetivo de abrirse a la comunidad».
Broto ha estado acompañada por el alcalde de lo localidad, Francisco Giménez; y la presidenta de la Comarca Campo de Borja, María Eugenia Coloma.
El centro se levanta sobre una parcela de 8.400 metros cuadrados y el edifico, inicialmente, va a tener capacidad para acoger a 20 residentes, además de contar con espacios comunes como salas de estar o comedores que favorecerán la vida en comunidad y el ambiente hogareño, han precisado desde el Gobierno de Aragón.
El alcalde ha explicado que el objetivo, cuando el centro esté en funcionamiento, es que «las personas que residan en él puedan realizar actividades con comunidad con otros recursos de la comarca, como el centro ocupacional de personas con discapacidad». En esta línea, la consejera ha subrayado la importancia de «abrir los centros a la comunidad en la que se integran», compartiendo servicios y fomentando la creación de redes que favorezcan la socialización.
La construcción del centro, de titularidad municipal, ha contado con una inversión de 1,4 millones de euros, de los que 750.000 euros corresponden a la herencia de María Alicia Camazano, una vecina de Agón que legó esta suma al Ayuntamiento de la localidad para que se llevara a cabo la obra y el municipio contara con este recurso.
Centro ocupacional campo de borja
Por otra parte, María Victoria Broto ha estado en el Centro Ocupacional Campo de Borja, donde, actualmente, 12 personas con diferentes grados de discapacidad realizan actividades para proporcionar a los usuarios herramientas para que puedan mantener o mejorar su autonomía personal.
El centro, según han explicado los profesionales, trabaja de manera individual y grupal, según las necesidades de cada persona y la actividad a realizar. «Contar con estos recursos en el territorio permite que los usuarios, vivan donde vivan, puedan contar con un servicio que mejora su atención, autonomía y calidad de vida», ha apuntado la consejera.
El espacio tiene capacidad para atender a 25 personas y en él se desarrollan talleres de terapia ocupacional, actividades psicomotrices, taller de habilidades sociales, entrenamiento en actividades de la vida diaria o actividades cognitivas con el objetivo de trabajar todos los aspectos importantes de la persona entendiéndola de una manera holística y dando importancia a todas las áreas que la componen.
Además, se llevan a cabo diferentes proyectos que ponen en valor las capacidades de las personas con diversidad funcional, haciéndoles participar en la sociedad de la que forman parte. Uno de los últimos proyectos que se ha llevado a cabo es 'Yo también (TE) cuento', que busca la integración de las personas con discapacidad intelectual en la sociedad en la que viven y en concreto en la comunidad educativa a través de la lectura y la ilustración.
Los integrantes de esta iniciativa participan en un club de lectura en Mallén, acuden a la piscina climatizada de Borja, en verano a la de Agón, y disponen de un gallinero y un pequeño huerto en verano.