El procedimiento para declarar la Casa de Juntas de Gernika «lugar de memoria» ha comenzado con la publicación este jueves en el Boletín Oficial del Estado (BOE) del acuerdo de la Dirección General de Memoria Democrática, que recuerda el bombardeo «indiscriminado» que sufrió la población civil del municipio vizcaíno hace 86 años por la Legión Cóndor alemana en apoyo «al militar insurgente» Francisco Franco en su intento de derrocar «al gobierno legítimo de la II República».
La Casa de Juntas de Gernika será el primer «lugar de memoria» que declarará el Gobierno central en base a la ley de Memoria Democrática. De esta forma, la norma quiere reconocer aquellos sitios con «significación histórica, simbólica o por su repercusión en la memoria colectiva, vinculados a la memoria democrática, la lucha de la ciudadanía española por sus derechos y libertades, la memoria de las mujeres, así como con la represión y violencia sobre la población como consecuencia de la resistencia al golpe de Estado de julio de 1936, la guerra, la dictadura, el exilio y la lucha por la recuperación y profundización de los valores democráticos».
El BOE publica hoy el acuerdo de la Dirección General de Memoria Democrática para incoar la declaración de «lugar de memoria» de la Casa de Juntas de la localidad vizcaína. En él se defiende que Gernika «es una de las localidades más representativas y simbólicas de la historia y el autogobierno de la sociedad vasca, del reconocimiento constitucional de la autonomía de las nacionalidades y regiones españolas, la diversidad cultural y lingüística y, a su vez, emblema universal del sufrimiento de la población civil en las guerras y la lucha contra los conflictos bélicos».
Subraya que, fundada por el Conde Don Tello en el año 1366, la villa "es conocida internacionalmente por haber sido víctima durante el transcurso de la Guerra de España (1936-1939), del bombardeo de la Legión Cóndor el 26 de abril de 1937, estando considerado este ataque como uno de los primeros bombardeos indiscriminados contra
la población civil en el mundo y configurándose como campo de pruebas de lo que posteriormente se pondría en práctica en la Segunda Guerra Mundial".
Asimismo, recuerda que no fue el único bombardeo a la población civil, porque Durango y Eibar, entre otras localidades, también
fueron «atacadas de esta brutal forma». «La aviación nazi atacó Gernika en apoyo al militar insurgente Francisco Franco en su intento por derrocar al gobierno legítimo de la Segunda República Española. La Luftwaffe (aviación alemana) bombardeó a la población civil y Gernika fue de esta manera devastada, no así la Casa de Juntas o el Árbol, que lograron mantenerse en pie», indica.
El 'guernica' de picasso
El documento apunta que "su supervivencia al bombardeo contribuyó a reafirmar a este roble como símbolo de autonomía y fortaleza de la
sociedad vasca«. También remarca que la obra 'Guernica' de Pablo Picasso fue realizada por encargo del Gobierno de la Segunda República Española para ser expuesto en el pabellón español durante la Exposición Internacional de 1937 en París, y contribuyó a que este episodio histórico »se haya erigido en icono del siglo XX y símbolo del sufrimiento que la guerra inflige a los seres humanos".
Asimismo, pone en valor que la Casa de Juntas de Gernika, junto al árbol foral que se levanta en su recinto ajardinado, «constituye el punto de encuentro simbólico de los territorios vascos». «Durante siglos, quienes iban a ser nombrados Señores de Bizkaia, juraban respetar las libertades vascas y los fueros antes de acceder al cargo bajo este roble», añade.
Con el paso de los siglos, señala que el Árbol de Gernika se ha convertido en un símbolo para toda la sociedad vasca y, por eso, el
Estatuto vasco lleva su nombre y el lehendakari jura allí su cargo. "El árbol simboliza las libertades tradicionales del territorio histórico de Bizkaia y de sus ciudadanos, y por extensión, las libertades de todos
los vascos ligados por una tradición cultural y etnográfica común", manifiesta.
"un deber inexcusable"
Por ello, considera que es "deber inexcusable reconocer la singular
relevancia en la historia democrática de España de la Casa de Juntas de Gernika-Lumo, quedando justificada plenamente la declaración como lugar de memoria de este inmueble vinculado al recuerdo del bombardeo de Gernika en 1937".
La declaración como «lugar de memoria» supone «la obligación de garantizar su perdurabilidad, identificación, explicación y señalización adecuada» de este espacio, así como la adecuada difusión «de lo acaecido en él». Esta declaración no altera el uso institucional.
En el caso de la Casa de Juntas, no es necesario adoptar medidas provisionales de protección durante la tramitación de este procedimiento, porque está declarada por el Gobierno Vasco como Bien de interés cultural en su categoría de Monumento.
El procedimiento establece que se dará audiencia al Ayuntamiento de Gernika y se le solicitará que se pronuncie sobre el régimen urbanístico del lugar. También se pedirán informes al Consistorio, a la Diputación de Bizkaia, a Gogora-Instituto de la Memoria, la Convivencia y los Derechos Humanos y la Universidad del País Vasco.
La Secretaría de Estado de Memoria Democrática resolverá el procedimiento y lo notificará en el plazo máximo de un año meses desde la fecha de su incoación. Posteriormente, se dará la posibilidad de realizar alegaciones, y se abrirá un período de información pública.