La Conselleria de Innovación, Universidades, Ciencia y Sociedad Digital, a través de la Agència Valenciana de la Innovació (AVI), financia el desarrollo de un nuevo tratamiento para el reciclado de neumáticos que, «no solo es más sostenible que los procesos actuales, sino que permite obtener caucho de mayor calidad para su uso en el sector de la construcción, las infraestructuras de transporte, las instalaciones deportivas o los parques infantiles, entre otros».
Impulsado por el Instituto Tecnológico del Plástico (Aimplas), el proyecto 'Recicautxu' pretende «dar una segunda vida a las cubiertas fuera de uso, evitando su almacenamiento en vertederos, que suponen un foco de insectos y roedores y elevan el riesgo de incendios».
La iniciativa cuenta con el respaldo de Agència Valenciana de la Innovación, que ha aportado 150.000 euros en el marco de la última convocatoria en concurrencia competitiva, que está financiada conjuntamente con la Unión Europea a través del Fondo de Desarrollo Regional (Feder), detalla la Conselleria de Innovación en un comunicado.
En la actualidad, conviven distintos sistemas de tratamiento para estos residuos, pero todos ellos presentan deficiencias desde el prisma de la sostenibilidad, lo que ha llevado a explorar alternativas en las que el caucho triturado se mezcla con otros plásticos con el fin de reaprovecharlos como materiales secundarios en nuevos productos industriales.
Estas tecnologías, sin embargo, tienen un amplio margen de mejora, ya que las propiedades de los materiales obtenidos hasta la fecha no alcanzan los estándares de calidad necesarios.
Precisamente Aimplas, en colaboración con el departamento de Ingeniería e Infraestructuras de los Transportes de la Universitat Politècnica de València (UPV) pretende desarrollar una nueva generación de compuestos con propiedades elásticas y de resistencia a impacto mejoradas para su uso en elementos de construcción, infraestructuras de transporte, interior de edificios, instalaciones deportivas, parques infantiles o señalizaciones y sistemas de seguridad vial.
Según el responsable de este proyecto en Aimplas, Vicent Martínez en la actualidad «las aplicaciones para los residuos de caucho son muy limitadas, lo que hace necesario ampliar el abanico de procesos de transformación de este material reciclado, así como buscar nuevos productos de mayor valor añadido. En este proyecto estamos buscando mejorar la valorización de este residuo a través de procesos innovadores que permitirán obtener nuevos materiales más sostenibles dentro de una economía circular».
Para mejorar las propiedades de estos residuos, Aimplas ha desarrollado una tecnología que revierte el proceso de vulcanizado de los neumáticos, que es un tratamiento al que se somete el caucho para incrementar su dureza y resistencia. La ventaja de este nuevo proceso es que se puede extender a otros tipos de materiales plásticos como las espumas de poliuretano, las tuberías de polietileno reticulado y los recubrimientos de cables, ampliando así las posibilidades de recuperación y reciclaje de este tipo de residuos.
De este modo, 'Recicautxu' prevé poner en valor las investigaciones que Aimplas ha venido desarrollando a lo largo de los últimos años en este campo y, contará para ello con el grupo de investigación de Ingeniería Ferroviaria, adscrito al departamento de Ingeniería e Infraestructuras de los Transportes de la UPV, sobre el que recaerá la validación de los elementos producidos con materiales reciclados. El objetivo, por tanto, es someter estos productos a tests de rigidez frente a cargas, ensayos de fatiga y de amortiguación de vibraciones, entre otros.
Valor añadido
«Cada año se recogen en España 160.000 toneladas de neumáticos usados, cuya gestión al final de su vida útil puede generar un gran impacto en el medio ambiente. Gracias a la innovación es posible obtener, a partir de residuos, nuevos productos con un elevado valor añadido, reduciendo el uso de recursos naturales, ofreciendo alternativas a las materias primarias y beneficiándose de un ahorro en costes y consumos de energía», ha precisado la consellera de Innovación, Universidades, Ciencia y Sociedad Digital, Josefina Bueno.
Por su parte, el vicepresidente ejecutivo de la AVI, Andrés García Reche, ha destacado la importancia de apoyar los procesos de transferencia de conocimiento y tecnología para que el resultado de las investigaciones que presentan aplicaciones potenciales en el tejido productivo terminen implementándose de forma efectiva en nuestras empresas y les otorguen un valor diferencial.
El proyecto se alinea, además, con la Estrategia de Especialización Inteligente de la Comunitat Valenciana, que sitúa entre sus prioridades en el eje de hábitat el desarrollo de materiales, productos y procesos avanzados, de bajo impacto ambiental, con nuevas aplicaciones de valor añadido, de forma sostenible y ecoeficiente.
Asimismo, la iniciativa que lidera Aimplas conecta con los retos y soluciones identificados por los comités estratégicos de innovación en Economía Circular y Hábitat Sostenible, que abogan por el desarrollo de sistemas de reciclado terciario para optimizar la valorización de residuos e implementar materiales de construcción más sostenibles.