El portavoz parlamentario de Unidas Podemos en el Congreso de los Diputados, Pablo Echenique, ha defendido que para él patriotismo es «trabajar para mejorar la vida de la gente, levantar la sanidad pública o acuerdos como el que hemos sacado adelante sobre la reforma de las pensiones».
Así ha respondido Echenique este sábado a una pregunta formulada por el exJefe del Estado Mayor del Ejército y secretario de Paz de Podemos, Julio Rodríguez, durante un acto de presentación de su libro 'Memorias de un piloto de combate', en el Centro Cívico de Delicias en Zaragoza. También ha estado presente la líder de la formación morada en Aragón y consejera de Ciencia, Universidad y Sociedad del Conocimiento en el Gobierno de Aragón, Maru Díaz.
El portavoz parlamentario de Podemos ha expresado: «Cuando me dicen vete a tu país es un exabrupto y un vómito fascista absurdo». Ha argumentado que si las personas son del país en el que han nacido, «Juan Carlos I sería italiano, al haber nacido en Roma; y la reina Sofía griega». Por tanto, ha esgrimido: «Si aceptamos ese axioma entramos en un ridículo».
El patriotismo, ha opinado, «es trabajar para mejorar la vida de la gente de tu país, pero para mí un país no es el paisaje, los monumentos ni la geografía, sino su gente y lo que ésta es capaz de construir colectivamente, también la sanidad pública o acuerdos como el que hemos sacado adelante sobre la reforma de las pensiones».
Con este acuerdo, Echenique ha considerado que se ha conseguido que el sistema de las pensiones «vaya a ser sostenible y sume 35.000 millones de euros más en la hucha cada año, tocando únicamente las cotizaciones de los de arriba y no bajando la pensión a nadie». Probablemente es la medida más redistributiva que vamos a tomar en toda la legislatura, ha declarado.
En este sentido, se ha referido a al presidente de la CEOE, Antonio Garamedi, «el falso autónomo irregular que gana 400.000 euros año», afeando que haya considerado este medida va a llevar al «apocalipsis económico». No obstante, Echenique ha zanjado: «Estos refuerza que se trata de un buen acuerdo».
Sobre el patriotismo, Pablo Echenique ha añadido: «Me molesta y es muy negativo para España asegurar que si se quieren cambiar cosas de este país, entonces no lo amas. Si quieres cambiar algo y mejorar, eres antipatriota. Es una falacia».
Mención a zaragoza y aragón
Por otra parte, Echenique ha reconocido echar de menos todos los días la ciudad de Zaragoza en su «exilio temporal a Madrid», por lo que «tiene un papel muy importante en mi libro, con un capítulo entero».
Asimismo, el portavoz de la formación morada ha contado que durante su etapa en la política aragonesa, de cara a las elecciones autonómicas de 2015, Podemos tenía opciones por primera vez de incidir en la política nacional, «entramos con mucha fuerza, con más del 20 por ciento de los votos».
«En el libro cuento cómo la noche previa a la cita electoral estaba obsesionado con la posibilidad de llegar a ser presidente del Gobierno de Aragón y pensé que para buscar consejeros iría a la universidad». Aunque, «años después» ha comprendido que eso era «inocente».
En esta línea, ha seguido: «Si hubiésemos sacado más votos y más diputados que el PSOE, eso no hubiera conllevado un gobierno liderado por Podemos encabezado por mi y los socialistas participando de forma subalterna, sino que hubiera conllevado un acuerdo entre PP-PSOE, para un gobierno conjunto o la abstención de uno para dejar al otro».
A día de hoy, Pablo Echenique ha remarcado que está seguro de que dicha situación se hubiese producido de esta manera. Aunque ha anotado que existen matices y todo depende del tipo de PSOE, sin embargo, «Javier Lambán --presidente del Gobierno de Aragón-- lidera un tipo de PSOE abierto a acuerdos con el PP».
Por su parte, Maru Díaz, actual consejera de Ciencia, Universidad y Sociedad del Conocimiento, ha apuntado: «Ahora tengo el privilegio de estar dentro del Gobierno de Aragón y conocer más nuestra tierra sé que acertamos con el lema 'Aragón, gente valiente', porque tenemos una comunidad autónoma de gente muy valiente y en los momentos cruciales de la historia han sabido ponerse en el lado bueno, como cuando lideraron el trasvase del Ebro o protagonizando la manifestación del 8M más multitudinaria».
"ejercicio de valentía"
Maru Díaz ha valorado que el libro 'Memorias de un piloto de combate' «un ejercicio de valentía», por cómo está contado, aunando humor, «tan importante en los tiempos que vivimos», con anécdotas. «Narras la discapacidad con naturalidad», ha apostillado.
«Todo el libro está circunscrito a un elogio a lo sencillo, a esa sencillez que acompaña a la política de los que la hacemos porque si no, no la hacen otros», ha observado Díaz.
Por su parte, Julio Rodríguez, ha reconocido que este libro le ha permitido «conocer mejor» a Pablo Echenique, que ha hecho un ejercicio de recordatorio, porque «es importante que las personas que han vivido determinadas épocas lo cuenten y tu rememoras momentos históric».
«Nos hace falta mucha dosis de historia reciente con lo deprisa que va el mundo», ha declarado, ya que «la manipulación política empieza en la manipulación del pasado».
Respecto a la metáfora del título del libro, 'Memorias de un piloto de combate', Echenique ha enunciado que responde a que algunas formas de hacer política que él practica «se pueden confundir con la valentía, pero son pura racionalidad». «El título se le ocurrió a Pablo Iglesias», ha señalado.
Ha detallado que lo que se denomina «lealtad» en política no es «afiliación ciega a un líder o partido, sino una condición sin la cual el proyecto se muere»; mientras que la política actual sigue una tendencia a la personalización, en la que los planteamientos dependen de la persona al frente y su reputación.
«Es esta manera de ver la actividad política es la que a veces me ha llevado a disparar misiles desde mi caza de combate en momentos señalados y pensados, siempre analizados previamente, para proteger a los que están al frente», ha reflexionado.
De esta manera, los detractores me califican de «medio loco y tuitero sin control»; pero los afines «me reconocen valentía». Pese a ello, «no es una cosa ni la otra, sino un síntoma de haber entendido el funcionamiento de la política en estos tiempos y saber lo que hay que hacer si se quiere defender la continuidad de un proyecto».